Una verdadera fiesta fue la que se vivió en la Plaza Bicentenario de Hércules, donde los equipos de futbol de amputados, Coyotes de Querétaro y Guerreros Aztecas del Distrito Federal disputaron un amistoso que terminó 3-2 a favor del cuadro capitalino.
El equipo queretano mostró una mayor conjunción y entendimiento durante un gran lapso del partido, debido en parte a que llevan más tiempo entrenando juntos que sus rivales en turno.
Sin embargo, los capitalinos mostraron esa determinación que hace a cualquier deportista encarar empresas difíciles y conquistarlas, lo que en esta ocasión se dio a la perfección, pues en la recta final lograron la voltereta.
Mención aparte merece la afición de los dos equipos, pues los visitantes llegaron con una reducida pero ruidosa y fiel porra que no los dejó de apoyar, mientras que del lado local, la gente también apoyó, por lo que se registró un lleno en el graderío.
Coyotes de Querétaro se puso arriba por conducto de su capitán Rodrigo Campos, quien en una descolgada, sacó un disparo que fue rechazado por el arquero, pero en el contrarremate pudo anidar la pelota para lograr el 1-0, que prevaleció hasta el descanso.
Mejor no pudo arrancar el complemento para los de amarillo y negro, que apenas a los cuatro minutos de reanudadas las acciones consiguieron el segundo por la vía de uno de sus goleadores habituales, José Antonio Valencia.
Luego, el partido cambió de tónica poco a poco, pues si bien los queretanos se relajaron de más, los visitantes comenzaron a tomar confianza y jugaron con mayor decisión, poniendo el extra en cada avance.
El primer gol fue obra de Martín Sierra, en tanto que Alejandro Anteu hizo el segundo en un contragolpe.
El tercero, ya en la recta final del cotejo, fue obra otra vez de Sierra, quien mostró su gran técnica para elevar el balón ante la salida del cancerbero y poner el 3-2 definitivo.
Al finalizar el partido, el entrenador de los Guerreros Aztecas, Rodolfo Martínez, se mostró complacido y orgulloso de lo hecho por sus pupilos.
“Estamos muy agradecidos por el recibimiento que tuvimos, la verdad es de admirarse el esfuerzo que hacen los muchachos dentro de la cancha, estuvo muy cerrado, cualquiera podría haberse llevado la victoria, pero nos tocó a nosotros”.
