Este día en el estadio Victoria de Aguascalientes no se juega nada más el derecho de Ascender a la Primera División o la ilusión de estaren la élite del futbol mexicano.

También está en juego ganar o perder muchos millones de pesos. Necaxa y Dorados juegan la vuelta por el Ascenso 2014-2015.

Los Rayos, campeones del Apertura 2014 y los Peces de Sinaloa, reyes del Clausura 2015, llegan al partido definitivo con un empate global a un gol. “Mínimo, de entrada, 100 millones de pesos”, dice Rogelio Roa, experto en marketing deportivo. “Habrá un incremento en entradas por todos lados, para el equipo que asciende, pero también los gastos van a subir”, explica.

Y es que las diferencias entre el Ascenso y la Liga son enormes. “El patrocinio de una playera en el Ascenso es de 5 millones de pesos en promedio, si se asciende sube por lo menos a 22 millones”.

El impacto también va para los aficionados, que deseosos de tener un equipo de Primera, “pagarán lo que sea para ir a ver los juegos. La taquilla en esta división es en promedio de 100 pesos, y si suben los boletos ya pueden valer 300 o 400. Claro, no es lo mismo ir a ver a tu equipo jugar contra el Altamira, con todo respeto, que contra América, Cruz Azul o Guadalajara. Las entradas serán mejores, los insumos subirán y también los patrocinadores aumentarán”.

Y falta hablar de los derechos de televisión, “claro, ahí es donde hay mayor ingreso. Dorados debe de cobrar por dejarse transmitir (por TDN) 2 millones de pesos al año... Ahora puede pedir 50, que es lo mínimo que cobran los clubes actuales [como Querétaro y Jaguares] y se puede dispara hasta 100”.

Y es que subir a Primera División es un gran premio, pero también un dolor de cabeza si es que no se sabe administrar. “Hoy la UdeG tiene finanzas muy sanas, por todo lo que ganó por estar en Primera, pero su precio total ahora está devaluado porque descendió. Quizá su franquicia llegó a valer 800 millones de pesos, y ahora sólo vale 80”.

Los presidentes de ambos clubes están conscientes de las ganancias y pérdidas económicas, pero redireccionan la atención a la parte deportiva, “ya que si no se consigue el ascenso, no hay ganancia”.

Memo Cantú, presidente de Necaxa quiere ser muy político. “Es un momento muy importante por las implicaciones que tiene. Esperemos hacer las cosas bien y tener la suerte de ascender”, dijo.

Cantú, junto con Ernesto Tinajero, dueño de Cablecom, compañía de telefonía, internet y tv por cable, son los principales accionistas del equipo de los Rayos, y asegura que se logre el pase o no, “seguiremos en Aguascalientes”. Sí, “el futbol es un negocio sui géneris, pero nos gusta y nos apasiona”.

Desde 2013, Dorados es propiedad en un 60 por ciento de Grupo Caliente, dueños de los Xolos, pero su presidente Antonio Núñez afirma que los clubes están debidamente separados. “De entrada ellos son de rojo y nosotros somos dorado y negro”, explica y aclara que Carlos Bustos no se irá a Tijuana, tal como se especula.

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