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Guadalajara .— Por separado, son empresarios habituados al éxito, con negocios prósperos y reconocimiento en sus respectivos ámbitos. Pero como pareja, Jorge Vergara y Angélica Fuentes han tenido que acostumbrarse a la polémica y críticas, pues son dueños del Guadalajara, un equipo que mueve el sentimiento de millones de aficionados en el país.

El club que manejan se encuentra en riesgo de descender por primera vez en su historia. Por eso, los encargados de tomar las decisiones importantes en Chivas se han convertido en blanco de señalamientos, al grado de convertirse en personajes repudiados por un importante sector de sus mismos seguidores.

Vergara Madrigal es fundador y propietario de la empresa de suplementos alimenticios Omnilife, la cual es considerada por muchos, una franquicia de productos “milagro”, aunque para otros es una fuente de ingresos al darles la posibilidad de convertirse en promotores. En octubre de 2002 logró lo que pocos hubieran imaginado: comprar al Rebaño Sagrado. Con una oferta de 6 millones de pesos para cada socio, logró convencer a la Asamblea de la Asociación Civil para que se transformara en Sociedad Anónima y le vendieran al club más popular de México.

En total, pagó cerca de 120 millones de dólares por el equipo que hoy en día valdría entre 600 y 800 millones de dólares en caso de que aceptara venderlo. Un negocio redondo, si se llegara a concretar, lo que demostraría su habilidad empresarial.

En el deporte, no puede presumir el mismo éxito, pues en 12 años al frente del Guadalajara, suma apenas un campeonato de Liga, en el Torneo Apertura 2006, mientras que su promesa de convertir al club en el mejor del mundo en un lapso de una década ha quedado en el olvido. Hoy, el conjunto rojiblanco lucha por salvarse para no descender.

Fuentes Téllez, por su parte, es egresada de la Universidad de Texas y se hizo cargo desde muy joven del Grupo Imperial Corporativo, la principal distribuidora de gas en el norte del país, empresa propiedad de su familia, que comandó entre los años 1985 y 2005, haciéndose de una fama importante en el mundo de los negocios de los hidrocarburos.

En ese tiempo fue llamada “La Reina del gas”. Fue en septiembre de 2007 cuando aceptó la invitación de Vergara Madrigal para convertirse en CEO de Grupo Omnilife. Meses después de ingresar a dicha empresa, se casó con el polémico empresario.

Con la realización de dos ostentosas bodas, en 2008, sellaron su compromiso marital. La primera se realizó en la India, apegada por completo a las tradiciones locales, en una celebración que comenzó el 14 de mayo y se extendió por cinco días. La segunda boda, por la ley civil mexicana, se llevó a cabo el 2 de agosto de ese año, en Los Cabos.

Desde ese momento, en Chivas se notó la importancia de la llamada “Reina del gas”. La primera determinación de Fuentes, principal responsable de la parte económica del equipo, fue inyectar el dinero que necesitaba para terminar el estadio. Durante la inauguración de la nueva casa del Guadalajara, el 30 de julio de 2010, una manta apareció. “Gracias Angélica por hacer este sueño posible”, decía. Era clara la trascendencia de la esposa de Vergara.

Para entonces, la señora Fuentes ya mostraba su embarazo. El 12 de agosto de 2010 nació Valentina Vergara Fuentes, con lo que se redondeó la historia de esta pareja, que en los años siguientes se sumergió en un mar de polémica del que no ha podido salir. Todo lo contrario: cada vez se hunde más.

Con la pareja ya casada, el equipo disputó una final de Copa Libertadores, en 2010. La perdió, pero la imagen del club no era mala. Sin embargo, los años siguientes han sido a la baja para el rebaño Sagrado. El equipo sufrió primero por la falta de inversión de capital. Los malos resultados comenzaron a hacerse frecuentes.

Cuando la situación comenzó a complicarse, Vergara y Fuentes perdieron el control. Apostaron por una larga lista de proyectos. Ninguno recibió apoyo total. La llegada del holandés Johan Cruyff como principal asesor, ha sido calificada por los propios empresarios como un error.

Al no consolidar un proyecto sólido, el equipo comenzó a hundirse. Y la afición, cansada de las derrotas, empezó a recriminar a los dueños. Después de cuatro torneos sin calificar a la Liguilla y permaneciendo siempre en la parte baja de la clasificación, el Rebaño Sagrado se encuentra muy cerca del descenso.

Y la afición, cansada del mal momento, recrimina a Vergara y Fuentes, quienes se han convertido en los “enemigos número uno” de los propios seguidores rojiblancos. La polémica los ha rodeado y parece que ya se han acostumbrado a ella. Y es que, a pesar de que se han comprado jugadores caros, Chivas no ha logrado enderezar el rumbo.

Por si fuera poco, en épocas recientes ha trascendido que la pareja está cerca del divorcio. Desde la venta de Chivas USA, hay versiones que aseguran la venta de todos sus negocios conjuntos para dividir bienes. Y eso incluiría, según esos dichos, al Guadalajara.

Hoy se realizará una asamblea extraordinaria del Club Deportivo Guadalajara, donde se autorizará la “transferencia de acciones” realizada en noviembre pasado. Al darse a conocer eso, la propia pareja ha intentado aclarar que no se trata de la venta de Chivas, sino que ellos mismos han comprado las partes que tenían accionistas minoritarios.

Pero en el entorno rojiblanco abundan las versiones que aseguran que intentan adquirir el total de acciones para, entonces sí, poder vender al equipo. Así, la pareja vive momentos turbulentos, con la polémica como costumbre y en medio de rumores, no sólo de la venta del club, sino también de su divorcio.

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