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Molesto porque Miguel Herrera ventiló aquella charla que sostuvieron tras decidir que Guillermo Ochoa sería el meta titular en la XX Copa del Mundo, José de Jesús Corona deja entrever que el entrenador de la Selección Mexicana le había insinuado que atajaría sobre los céspedes del gigante sudamericano.
Hacer público lo sucedido en el cuartel mundialista del Tricolor no agradó al arquero del Cruz Azul, quien no se siente en deuda ni con él mismo, pese a que no cumplió el sueño de jugar en el máximo evento futbolístico del orbe.
“Estoy tranquilo con mi trabajo”, sentencia. “Él [Herrera] había hablado conmigo hace tiempo, tenía todo muy claro. Desafortunadamente, me tocó que cambiara su opinión, y ni hablar”.
“Dejé todo dentro de la cancha, ya sea con mi equipo, durante la temporada; cuando se me dio la oportunidad en Selección, de igual manera. De ahí en más, no había algo en mis manos. Simplemente, demostrar y ponerme a trabajar era lo mío, así es que por eso estoy tranquilo”.
—¿El Piojo te prometió o aseguró que serías el guardameta titular en Brasil 2014?
—Primero, quiero ver la entrevista [que concedió el director técnico nacional] y después daré mi opinión.
Corona aclara que, pese a su frustración, jamás causó algún conflicto al interior del grupo y hasta manifestó su apoyo al elegido.
“Fue una plática que tuvimos individualmente, entre él y yo, la cual jamás diría a los medios de comunicación”, insiste. “Lo que sí le dije es que, para mí, siempre estará primero el equipo...”.
Respalda el discurso con la postura adoptada ante la inminente ratificación de Herrera, por más que haya solicitado observar la polémica entrevista antes de decidir si aceptaría una convocatoria.
“[La continuidad] son decisiones que toma la directiva y qué bueno”, aplaude. “El equipo mostró buena cara en este Mundial, se ha trabajado de buena manera y qué bueno”.
Talavera no se negaría
A diferencia de la incógnita dejada por el cruzazulino, Alfredo Talavera, el otro portero mundialista que se quedó en la banca, asegura que no declinaría una invitación a integrar el representativo nacional.
“No me alejaría de la Selección hasta que otras cosas pasen”, afirma. “Es un orgullo estar ahí”.
Y revela que le dolió no ser considerado: “Hay una gran ilusión de jugar y, cuando te dan la decisión de que no eres el que va a iniciar o jugar, pues obviamente te pega; no nada más a Chuy, también a mí”. (Con información de agencias)
