El Barcelona dejó prácticamente resuelta su clasificación para los octavos de final de la Champions League, al vencer 3-1 a un apático Olympiakos, que renunció a intentar aprovechar su superioridad numérica tras la expulsión de Gerard Piqué, al minuto 42.
Una anotación en propia puerta de Dimitris Nikolaou abrió el camino del triunfo azulgrana, definido en la segunda parte con los tantos de Leo Messi —quien llegó a un centenar de goles en torneos europeos—, y Lucas Digne. Ya casi al final llegó el tanto del honor para los griegos, anotado precisamente por Nikolaou.
El choque fue un paseo para el equipo de Ernesto Valverde, que completó su tercer triunfo de la fase de grupos.
El Olympiakos heleno sigue sin puntos en el Grupo D y en el Camp Nou mostró la razón.
Ya con la ventaja, el Barcelona decidió tomarse el choque como un entrenamiento con público, dada la apatía y falta de competitividad del rival.
Así resolvió una victoria más dentro de una Liga de Campeones, que de momento está siendo casi un trámite para el conjunto de Valverde.
“Debemos tomarnos las cosas con calma cuando van muy bien y muy mal. Con el ruido mediático, nos movemos en extremos y no es así”, señaló el estratega blaugrana.
Valverde no quiso referirse a la situación política en Cataluña, “estoy aquí porque soy entrenador del Barça”, apuntó, y reiteró que lo único que quiere “es que los aficionados estén contentos”.
Asimismo, se refirió a la efeméride de Lionel Messi y el tanto 100 en competiciones europeas: “Espero que llegue a 200 esta temporada. Sus números refrendan lo que vemos cada día”, finalizó.
