La presión del centenario en el América resultó tan fuerte que cobró a su primera víctima. Quien releve a Ignacio Ambriz tiene la encomienda de ganar y gustar en lo que resta de los festejos del América. Reto nada sencillo.

Nacho falló en lograr deleitar las pupilas de los fieles emplumados, hacer imbatible a las Águilas en el Estadio Azteca y ganarle al Guadalajara, su acérrimo. Su sucesor, está obligado a cambiar esa historia. Por si fuera poco, ganar títulos y brillar en el próximo Mundial de Clubes.

“Estamos afortunadamente en un momento en el que no me Había tocado a mí quitar o cortar un proceso. Afortunadamente, hoy estamos en zona de calificación en la liga, estamos esperando iniciar la Copa MX en casa como primer lugar y tenemos el Mundial de Clubes enfrente”, presumió Ricardo Peláez, presidente deportivo águila, quien aclaró que en uno o dos días informaría el nombre del sustituto.

El dirigente dejó claro que, pese a la modificación en la dirección técnica: “ los objetivos son iguales y la determinación el compromiso con nuestra afición no varía absolutamente nada. El equipo tiene la obligación de clasificar, pelear por el título en la liga. Vamos a ir por la copa y vamos al ‘Mundialito’ para hacer un buen papel”.

Ambriz llevó a los azulcrema al séptimo lugar de la tabla de posiciones con 14 puntos, mismos que acumula el Guadalajara.

El siguiente técnico deberá clasificar a la Liguilla por el título y superar las semfinales, situación que no logró el despedido entrenador mexicano en dos intentos.

Una de los máximos reclamos del americanismo en el Apertura 2016 fue que “Nacho” no pudo consolidar a un equipo ganador en en el Coloso de Santa Úrsula.

Hilvanó una racha de cuatro partidos sin poder vencer en casa, con las debacles ante Tigres (0-3), Guadalajara (0-3) y León (0-2), además de una empate grisáceo ante Morelia (1-1). Los abucheos fueron generalizados, tendencia que tendrá que maniobrar el siguiente técnico de las Águilas.

Como primera oportunidad de “recuperar” el Azteca tendrá un duelo ante los Pumas el próximo sábado, que es el tercer y último clásico de torneo regular que encararán los azulcrema.

La posibilidad de enfrentar al Guadalajara en las semifinales de la Copa MX resulta alentador para el americanismo. Sería la oportunidad perfecta para vengarse del Rebaño Sagrado en un certamen está en su fase de eliminación directa. El sucesor de Ambriz deberá no sólo buscar toparse al chiverío, sino también alzar el título para poder cambiar la humillación en la Liga.

Lidiar con los críticos que actualmente posee la administración de Peláez en el América representa otra empresa compleja.

En las redes sociales, leyendas de las Águilas como Carlos Reinoso y Antonio Carlos Santos han manifestado su desagrado ante lo mostrado por el club 12 veces campeón de Primera División.

De hecho, se convirtieron en los más severos detractores de la etapa de Ambriz en el banquillo emplumado y mostraron sus intenciones por dirigir al América.

La nueva apuesta de Peláez deberá congeniar con una imagen del americanista que se ve a sí mismo como un aficionado acostumbrado a ganar y que tiene escasa tolerancia ante los fracasos.

El dirigente americanista ya no puede fallar otra vez. Él mismo, cuando anunció a Ambriz como técnico, dijo que “si no hay buenos resultados, el próximo que se tiene que ir, soy yo.

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