Además de su maleta, David Patiño viaja a Mérida con el traje que utilizará durante su presentación como director técnico de los Pumas. Debut y despedida para un hombre institucional, quien aguarda por una oportunidad real.

Segunda vez que funge como “bombero”. En septiembre se hizo cargo del primer equipo tras la salida de Juan Antonio Torres Servín, pero sólo permaneció un día. José Luis Trejo llegó al relevo.

Ahora, ha dirigido cuatro prácticas y esta noche tendrá a su cargo el partido de Copa frente a los Venados. No más. Entregará la estafeta a Guillermo Vázquez en cuanto vuelva al Distrito Federal.

El ex atacante toma con calma su actual rol, aunque revela su deseo de —algún día— ser la principal apuesta de la directiva felina.

“Ya tengo trabajando en esto, como director técnico, algunos años”, recuerda, con tono nostálgico. “No tantos. Empecé en 2006 y, afortunadamente, me ha ido muy bien en prácticamente todos los lugares en los que he estado”.

“Continúo teniendo la ilusión [de dirigir a los universitarios de manera permanente] y voy a seguirme preparando, para que lo pueda aprovechar cuando sea mi momento”.

En el fondo, siente que todavía le falta terminar el proceso necesario para ostentar el cargo. Al menos, eso refleja su discurso.

“Algún día se me dará de manera definitiva, pero —por lo pronto— estoy contento por el club, que es lo más importante”, asegura. “Voy a estar en la banca [frente al Mérida], tendré ese privilegio”.

Pese a que el conjunto de sus amores no le ha dado la oportunidad en la Primera División, el capitalino ya tiene experiencia. Estuvo al frente del Morelia entre el Apertura 2007 y el Clausura 2008, con balance de 11 victorias, cuatro igualadas y 16 derrotas.

También sumó partidos en la Liga de Ascenso, como máximo responsable de la hoy desaparecida filial de los Monarcas, el Mérida, el Atlante UTN, el Neza y el Veracruz.

Su actual cargo es director técnico del equipo Sub-20 de los universitarios, aunque no descarta integrarse al cuerpo técnico de Vázquez como auxiliar.

“Eso lo definirá Memo directamente, con su gente más allegada, pero por supuesto que estoy en la mejor disposición de trabajar con él”, comparte.

Defiende a la cantera

Aunque el actual primer equipo de los Pumas posee a nueve futbolistas no nacidos en México, Patiño asegura que la labor dentro de las fuerzas inferiores no ha disminuido, en cuanto a calidad.

Lo que demanda es mayor confianza en los chicos... Y está seguro de que Vázquez la tendrá.

“El trabajo nunca se ha dejado de hacer. Ahí tenemos una percepción un poquito equivocada, en general”, acusa, serio. “El trabajo de fuerzas básicas siempre ha estado ahí, los jugadores también”.

“Lo cierto es que, de algunos torneos para acá, los espacios que se deberían abrir para los jugadores de fuerzas básicas no se han abierto. Esa es la realidad, no que no haya futbolistas en fuerzas básicas”.

Falencia que, está convencido, tendrá pronta solución.

“Memo conoce bien las relaciones que siempre hay en la institución, entre los equipos de fuerzas básicas y el primer plantel”, presume. “Va a buscar regresar a lo que se hacía en las décadas de los 80 y 90”.

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