Grata impresión dejó “El Canelo” en su presentación en suelo queretano, después de un largo periodo de ausencia en su tierra, donde mostró notorios avances y donde se le observó muy puesto, relajado y gustándose con un toro complicado, con el que demostró porqué le fue muy bien en su gira centroamericana. Con el capote se le notó muy seguro, lanceando con clase y lidiando bien. Con las banderillas, como siempre, espectacular y certero, brindó la muerte del encastado a Jesús Garduño y a Martín Silverio. Con la muleta, andándole muy bien al toro, pudiéndole y lo mejor, gustándose, conectando de inmediato con el público que hizo buena entrada, se tiró a matar por derecha, señalando un pinchazo en lo alto que los amantes de la fiesta taurina reconocieron al segundo y certero viaje rodó sin puntilla, para recibir una oreja, que de no haber pinchado seguramente hubiesen sido dos. El rejoneador Zatarain, terminó con ovación. Manolo Valencia, con un novillo de Elvira Tapia se vio muy solvente y con sitio, cortó una oreja. Ramón Olvera, con mucho gusto y disposición con un buen novillo de Lecumberri, lanceó bien y con la muleta corrió bien la mano, consiguiendo muy buenos muletazos del agrado de público, pero perdió las orejas por fallas con el acero. El próximo jueves 25 de octubre, en la Feria de Coroneo, Guanajuato, “El Canelo” regresará a los ruedos, esta vez en una corrida de toros, mano a mano, con el colombiano Manolo Valencia donde se espera una tarde llena de emoción y buen toreo.

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