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ATLANTA.—El peso de las derrotas fue liberado con un par de triunfos. La tensión, los rostros duros y las palabras cortantes quedaron a un lado en el seno de la Selección Nacional. Ahora hay risas tricolores porque el buen humor ha regresado.
“Sí, sin duda que sí [se liberó la presión], se trabaja diferente cuando ganas, estamos hasta ahora tranquilos, nos hubiera gustado calificar en el primer lugar del Grupo, pero no se pudo por el partido tan malo ante Panamá, pero esta selección viene en ascenso”, presume Rafael Márquez Lugo, delantero.
La época de crisis en los combinados nacionales había dejado amargura en los elementos del Tri. Siempre tenían que amortiguar la manifestación inclemente de críticas por la falta de resultados en los torneos en los que competían.
Llegó la Copa Oro y se inició con un descalabro ante Panamá. La oleada de denostaciones amenazaban con agudizarse. Pero México pudo vencer sin grandes problemas a los canadienses y luego Martinica, para que todo volviera a la normalidad y estén a tres partidos del título.
El atacante del Guadalajara explica que deben aprovechar esa circunstancia de trabajar con menor tensión y tener una semana de descanso ante de enfrentar a los trinitarios “para mejorar, para que se recuperen los lesionados, y preparar bien el partido ante Trinidad”.
“Tenemos que ir paso a paso, fortalecer lo que nos ha mantenido hasta acá, el ser intensos, que lo hemos mostrado en los útimos dos partidos, hay que recuperar el balón, mucho más cerca del arco contrario y mejorar en tratar de mejor manera el balón”, enfatiza Márquez Lugo.
Uno de los más optimistas en el torneo de la Concacaf es Marco Fabián. Los goles le llegaron en los últimos partidos. Se le nota su carácter participativo, la atención hacia los aficionados y el poder mantener una mueca de alegría en el rostro.
Es hombre feliz porque ha destacado en el grupo e incluso afirma que el buen estado de ánimo es igual en la concentración mexicana en Atlanta, porque están en la búsqueda del segundo tricampeonato de la Selección Nacional en la Copa Oro.
“El equipo ha venido de menos a más, ya se ve mucho ambiente, tenemos que corregir errores que hemos cometido que son detalles para que el equipo tengo un mucho mejor papel”, explica el creativo del Rebaño Sagrado.
“Tenemos que destacar lo que ha hecho México en torneos anteriores y ésta no debe ser la excepción. Tenemos la calidad para ganar este torneo”, asegura Fabián.
Como los dos Chivas, el resto del plantel de la Selección Nacional se considera tranquilo, aunque están conscientes de la responsabilidad que implica estar en una fase de vida o muerte. Se divierten y disfrutan su entrenamiento en Atlanta como si la tensión nunca hubiera existido en el Tricolor.
