Monterrey.— Sus cristalinos ojos asoman el dolor que les invade. La ilusión puma languideció durante 90 desastrosos minutos sobre el lienzo verde del estadio Universitario, pero aún les queda un arma: inquebrantable fe.

Los dirigidos por Guillermo Vázquez están conscientes de que remontar el 0-3 sufrido antenoche contra los Tigres luce casi imposible, mas apelan al espíritu heroico de una institución que tiene como precepto nunca dejar de luchar.

“Mientras estemos vivos, no vamos a bajar los brazos en algún momento”, sentencia el atacante uruguayo Matías Britos. “Saldremos en nuestra casa con rebeldía y amor propio a dejar todo en la cancha. Este equipo se encuentra hecho de gestas y buscaremos otra”.

Aunque nunca ha logrado una de magnitud similar. Es la cuarta ocasión en la historia que los felinos caen por tres o más goles de diferencia en un cotejo de ida dentro de la Liguilla. En las anteriores tres se llevaron la vuelta, efectuada en CU. El problema es que no les alcanzó. El primer antecedente se dio en los cuartos de final de la temporada 1975-76. Fueron goleados por la Unión de Curtidores (3-0) y sólo se impusieron en la vuelta 2-1.

La única vez que se quedaron cerca fue en la reclasificación del ciclo 1992-93, curiosamente contra los Tigres. Al igual que el jueves, cayeron en el ‘Volcán’ por 3-0, y tuvieron una furibunda reacción como locales. Llegaron a estar arriba 4-0, mas un tanto del brasileño Marcelo Conte (87’) dio a los norteños el empate global a cuatro y el boleto a la siguiente ronda por mayor número de anotaciones como visitantes.

Su más reciente intento fue en las semifinales del Apertura 2002. El Morelia los goleó en el Morelos (4-0) y ellos ganaron la vuelta por 2-1.

Recuerdos que les condenan, pero el goleador Eduardo Herrera recuerda que “el equipo tiene que buscar hacer las cosas bien. Estamos enojados entre nosotros mismos, apenados con la afición por este resultado, a causa del accionar del equipo en sí, pero tenemos que reaccionar, brindarnos al máximo el domingo para tratar de revertir el resultado y buscar la remontada”.

“Vamos a luchar por eso. Hay que levantar la cara. Se ha hecho un muy buen torneo, sólo fue un mal juego en la ida”, complementa Antonio Sancho, vicepresidente deportivo del club. “Desde el inicio, el equipo ha luchado, y no dejaremos de hacerlo ahora”.

Necesitan ganar por tres anotaciones de diferencia para forzar el alargue. Serán campeones si triunfan con cuatro o más de distancia.

Durante el Apertura 2015, vencieron como locales al Monterrey (3-0), el Atlas (5-0) y el Veracruz (3-0), resultados que les servirían, pero los Tigres no han recibido más de dos anotaciones en algún partido del torneo. Por si fuera poco, jamás les han hecho cuatro con Ricardo Ferretti como entrenador.

“Hemos dejado de hacer muchas cosas y ahora tenemos un resultado que se ve difícil, pero no es imposible”, insiste Herrera. “Si el equipo hace bien las cosas en CU desde el inicio, todavía se puede. En el futbol, nada es imposible”. Es lo único que les queda, porque ni siquiera las estadísticas están de su lado.

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