GUADALAJARA.— Como un médico que estudia los síntomas del enfermo, John Van’t Schip analiza al Rebaño Sagrado. Da un repaso al pasado, visualiza el presente y emite su diagnóstico: “Chivas está de regreso”.

Guadalajara tiene más vida que nunca y para llegar a la Liguilla se dispone a disputar cinco finales.

“Cada partido es ahora una final. Debemos preparar bien cada uno, empezando con Jaguares que está abajo sólo un punto. Es importante afrontar a estos equipos como si fuera una final para entrar a la Liguilla”, explica el holandés.

Por la cabeza del estratega europeo no atraviesa la posibilidad de quedar fuera. “Estamos en un buen momento. Debemos aprovechar para entrar a la Liguilla. Está muy complicado, porque muchos equipos compiten por el mismo objetivo; estamos bien ahora físicamente y también moralmente”, señala.

En el repunte del Rebaño Sagrado ha resultado fundamental la unión del vestidor, que aguantó la separación de dos compañeros (Michel Vázquez y Julio Nava). Aunque, John van’t Schip asegura que no le interesa hacer amigos.

“Nuestro grupo es muy compacto. No estoy aquí para ser amigo de todos, pero tampoco estoy aquí para ser un entrenador que decide sin hablar. Un entrenador debe tomar decisiones que posiblemente no le caigan bien a un jugador, pero es el trabajo. Debo tomar decisiones. No me da miedo eso”, sentencia.

Por otra parte, el técnico criticó el hecho de que la Liga haya decidido no parar por la Fecha FIFA.

“No es bueno para el campeonato; todos quieren mirar a los mejores jugadores. Ahora están con la Selección Mexicana; eso sí es cuestión de planeación. Otros equipos también tendrán problemas por la ausencia de jugadores que deberán estar con la Selección”, asevera el técnico holandés del Guadalajara.

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