Allá en Torreón, allá en el Corona, los tiempos, los colores eran otros...

También los goles.

Allá en Torreón, Oribe Peralta, junto con Darwin Quintero destrozaban las defensas rivales.

Ambos compartieron vestuario con Santos Laguna durante nueve torneos, del Bicentenario 2010 hasta el Clausura 2014, tiempo en el que hicieron un total de 126 goles. Oribe anotó 80 y Darwin poco más de la mitad (46).

Con el América, en apenas nueve juegos han marcado cinco... Cuatro de Peralta por uno de Quintero.

Es que en Torreón eran otros tiempos, y ahora que tendrán la camiseta albiverde de frente, éstos vuelven a la memoria. “Va a ser algo raro [jugar contra Santos] por todo el tiempo que viví y lo que obtuve en Torreón... Es como volver el tiempo atrás, pero ya pasó. A Santos lo llevo en mi corazón, ahora me debo al América y buscaré sacar lo mejor para este club”, dice Darwin, un Darwin que no ha dado lo que de él se esperaba, que no es el mismo de Torreón.

Oribe se ríe tímidamente, la cuestión sentimental ya pasó a segundo término, eso se lo deja al colombiano.

—¿Por qué no juegan igual que en Torreón?, se le pregunta a Quintero.

“Bueno... No de la noche a la mañana vamos a ser la dupla explosiva que vieron antes, pero estamos tranquilos y trabajamos para llegar a un óptimo nivel, ojalá lleguemos más pronto que tarde”, dice el delantero nacido en Tumaco, Colombia, hace 27 años.

¿Por qué tanto drama? Oribe Peralta es más seco. El delantero no entiende por qué tantas críticas al América.

“No entiendo por qué tanto drama por los resultados. Estamos en un proceso, hay un técnico nuevo, jugadores nuevos, y nosotros mismos nos exigimos en cada juego. No estamos esperando que la directiva venga a reclamarnos, estamos conscientes de lo que estamos dejando de hacer en la cancha y lo que tenemos que hacer para revertir la situación”.

Hay más en torno del delantero americanista, como aquel golpe que recibió en el juego ante la UdeG, y que causó un grito de alarma en cuanto al cuidado del futbolista en la cancha.

“La gente que está aquí se encuentra capacitada para atender este tipo de situaciones”, menciona, tratando de quitar culpas. “Si el doctor me hubiera visto mal, no me habría dado la oportunidad de jugar, de regresar”.

Harto de lo mediático que resulta todo lo que sucede en Coapa, Peralta no deja de quejarse, “se habló mucho de eso, a cualquiera le puede pasar. Fuimos con neurólogos y todos dijeron lo mismo. Es un golpe que te puede dar tu hija jugando, o cuando te pegas con una puerta, son cosas que pasan, accidentes, y [ustedes] están achacando cosas al doctor, cosas que no tienen nada que ver”.

Así que para el ‘Hermoso’ Peralta, todo en el América está bien. El estar en tercer lugar de la tabla, haber obtenido 15 puntos y tener 12 goles a favor, por seis en contra es suficiente.

“No estamos presionados. Estamos en zona de calificación y es lo que nos interesa”, afirma.

Lo primero en el club, “es calificar, y después pensaremos en la Liguilla. También está la ‘Concachampions’, donde avanzamos, queremos llegar al Mundial de Clubes. Estamos muy conscientes de lo que queremos, y lo que hablamos entre nosotros, no tenemos por qué sacarlo a la luz”, finaliza.

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