Tarde taurina de menos a más. De emociones y algarabías en los tendidos, de entrega y valentía dentro del ruedo de la plaza de toros Provincia Juriquilla con un mano a mano que llenó los tendidos del coso queretano y que se cimbró al grito de “Torero, torero” para los dos espadas que salieron a hombros del lugar.

El diestro de Aguascalientes, Joselito Adame, demostró que atraviesa por un gran momento, pues resultó triunfador del duelo ante Julián López “El Juli”, al cortar tres orejas (dos con el cuarto y una con el sexto) en la segunda corrida de la temporada 2014 en la plaza queretana, mientras que el madrileño se llevó dos apéndices con el quinto del día, el segundo de ellos por la insistencia de los aficionados.

El hidrocálido enfrentó a “Pollote” en su segunda aparición, un astado de 472 kilogramos, al que enganchó con una gran faena con el capote por las cualidades que mostró, y con el que arrancó de inmediato sonoros olés de los tendidos.

Regresó tras el tercio de banderillas e hizo cinco pases con estatuario y remata con un pase cambiado que emociona al respetable, que vive de cerca la labor. Joselito pide música, y la banda entona El Hidrocálido con el que el torero continúa con su labor.

La tanda de pases continúa por la derecha del torero, mientras en los tendidos se escucha el coro de la melodía “Viva Aguascalientes”. Adame se echa a la bolsa a la afición y disfruta su labor, encara de frente al toro mientras el público se desvive entre olés y algarabías.

Se tiró a matar cuando la música terminó. El silencio era total, pero al momento de ver la estocada hasta la empuñadura con el acero, un júbilo inmediato cimbra el lugar con el grito de “torero, torero”. Una faena que al final fue la más variada y de mayor calidad del festejo taurino.

Con su tercero de la tarde “Luna Roja” y último del día, Joselito volvió a entregarse de lleno y a emocionar al respetable que no dejó ni un momento de acompañarlo en su faena con sus gritos de aprecio. Convence con la muleta y se tira a matar con una estocada perfecta que celebra saltando en medio del ruedo, pero el juez no otorga premio, hasta que la insistencia logra finalmente un apéndice más con el que termina como el triunfador del día.

El torero madrileño Julián López “El Juli” primero se encontró con un rival de poco juego; con el tercero del día descabella en un par de ocasiones, pero con el quinto de la tarde “Rumbero”, cuajó su faena más elaborada y sentida, de mucha transmisión en los tendidos por la valentía del torero de colocarse muy cerca de los pitones del toro.

Con una estocada perfecta culmina su mejor faena que el juez considera vale una oreja, pero la insistencia del público de nueva cuenta es factor para que la autoridad le entregue el segundo apéndice.

Antes de iniciar con la corrida el sonido local recordó los logros de una figura del toreo nacional, Eloy Cavazos, quien recibió una placa de manos del empresario Juan Arturo “Pollo” Torres Landa, la cual se quedará para la posteridad en los muros de la plaza queretana, un hecho que atestiguaron los matadores Julián López “El Juli” y Joselito Adame.

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