KINGSTON.— Atajadas agónicas, a quemarropa, en el momento de mayor adversidad. Jesús Corona apareció en Kingston para “salvar” la victoria de la Selección Mexicana y sus compañeros lo reconocen como el héroe del Tri.

“Me tocó hacer el gol del triunfo, pero no soy el héroe”, rechaza Aldo de Nigris, para cederle esa etiqueta a su guardameta, a quien no se cansa de alabar: “Ese papel se lo dejo al portero Jesús Corona. Hay que felicitarlo por el gran trabajo que hace. Es un gran arquero y es bueno tener la seguridad de tener un portero como él”.

Tras el gol del atacante regiomontano, los Reggae Boyz pusieron en riesgo el primer triunfo del Tricolor en 2013. Dos cabezazos amenazaron la portería mexicana, pero apareció “de la nada”, el meta cruzazulino para evitar cualquier daño. Andrés Guardado también halaga a Corona y describe el instante por el que pasa.

“Impresionante. Chuy está en un gran momento, lleva un par de años demostrando que es uno de los mejores porteros de México, si no es el mejor hoy en día... todo equipo necesita tener un gran portero y nosotros lo tenemos”, dice el volante.

José de Jesús había perdido la titularidad en los dos duelos anteriores y recuperó el puesto en Jamaica para demostrar su valía, por lo que “estoy muy agradecido de nuevamente empezar el partido, ayudar a la Selección y qué bueno, es una gran satisfacción ayudar a los compañeros”, afirma.

Corona tuvo que reponerse a uno de los golpes más duros de su carrera deportiva. Perder en los últimos 30 segundos el campeonato del futbol mexicano con el Cruz Azul, a manos del América, lo dejó maltrecho. Mas sacó el carácter, no se dejó vencer y en cuanto se vistió de verde asumió que “había que darle la vuelta a la página” a lo sucedido con su club, apenas unos días atrás.

“Fue un golpe muy duro [caer en la final del Clausura 2013], para nosotros, para mí, el no haber podido obtener ese objetivo, ese título, pero debemos dar vuelta a la página como profesionales”, asume Chuy. “En la vida misma, a veces se consiguen las cosas, a veces no, pero es importante seguir luchando en beneficio de uno y del grupo”.

La lección que le dio la derrota ante las Águilas le ha servido como aliciente para brillar con el Tri.

“Uno va aprendiendo de los golpes de la vida. Hace unos días perdimos la final, pero no se acaba la vida, ni la profesión, tenemos que seguir adelante, pedir oportunidades y ahora con la Selección tenemos que sumar”, manifiesta.

Con humildad, el guardameta se siente contento por la victoria consumada en Kingston y quiere repetir la historia ante Panamá y Costa Rica.

“Ganar nos viene a sumar en lo anímico, la motivación y la confianza, que es importantísimo para todo grupo y tenemos que seguir por esa línea del sacrificio, de la unión y sólo así podemos conseguir las dos siguientes victorias”, dice satisfecho.

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