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MADRID.— El infierno de Estambul se enfrió desde Madrid. El Real prácticamente definió la eliminatoria al derrotar por 3-0 al Galatasaray, en juego por los cuartos de final de la Liga de Campeones de Europa.
Los merengues lucieron poderosos ante unos turcos que pagaron cara su osadía de tratar, primeramente, de jugar de tú a tú en el Santiago Bernabéu, y después, cuando se iban por dos goles abajo, cerrar su arco, pensando en la vuelta, sin esperar que el tercero definiría la serie.
Cristiano Ronaldo abrió el marcador. Y sentenciaron los dos criticados “9”. Primero, Benzema dejó salir la presión que lo rodea y después, desde la banca, vino Gonzalo Higuaín, a quien “no se le da Europa”.
Apenas se jugó el primer duelo y la serie parece terminada. El infierno de Estambul se enfrió ante el poderío de un Madrid que huele a semifinalista. “El Madrid es más fuerte, tiene más argumentos y, cuando haces un gol tan pronto, la historia es diferente”, dijo José Mourinho.
Pero el entrenador merengue no dio por sentenciada la eliminatoria: “El Galatasaray ha hecho todo para hacer un partido diferente. Ellos saben que es muy difícil, pero pienso que van a darlo todo para conseguir algo histórico”, dijo.
Galatasaray quiso ser el de siempre, pero al final acabó siendo como todos los equipos que visitan el Bernabéu. Quiso tener el balón, y lo tuvo; quiso pararse en campo del Madrid, y se paró; quiso atacar a los Merengues y los atacó. Al final, como todos los que se atreven, de poco le valió.
Real Madrid no inventó. Mourinho uso el futbol que le gusta y que le da resultados. Aguantó el intento de los turcos. Didier Drogba puso a prueba a Varane, también a Diego López, y aunque los superó, falló en las dos oportunidades claras que generó, mientras que el Madrid esperaba agazapado su oportunidad.
Y no esperó mucho. Metsul Özil tomó el balón, entre tres rivales lo dio a Cristiano Ronaldo, quien definió como crack (8’) y comenzó a acabar con el ambicioso plan turco. Galatasaray se sintió herido, mas no optó por modificar su intención y el Madrid mucho menos. Ahora fue Essien, como lateral, quien mandó el balón hasta Benzema y éste controló y definió para marcar (28’) y sacar toda la presión que arrastra desde hace meses. Al fin anotó.
La estrategia turca terminó. Si en algún momento apostaron por dar la sorpresa, ahora el mandato de la banca fue que esto no terminara en una goleada escandalosa.
El Madrid siguió tocando la pared hasta que ésta cayó. Higuaín definió el encuentro con un cabezazo (72’)... y parece que la eliminatoria.
Pipita señaló que su gol cayó en un “momento vital” al advertir que si Galatasaray lograba descontar “nos hacía mucho daño y uno [gol] nuestro lo dejaba todo encarrilado”.
La vuelta en Estambul será más sencilla de lo imaginado. Hasta Ramos y Xabi Alonso buscaron la tarjeta amarilla para entrar limpios a las semifinales. “Es el resultado que buscábamos, marcar y no encajar”, dijo Xabi. “Pero en el futbol pueden pasar muchas cosas”. Así es, Real Madrid apagó el infierno desde casa. La eliminatoria parece definida, aunque en el futbol, todo puede pasar.
