San Diego.— A Miguel Layún le gusta decirle a las cosas por su nombre. El veracruzano no tiene miedo a llamarle fracaso al hecho de que México no gane la Copa América Centenario.
El objetivo de la Selección es llevarse el trofeo a casa. El que el campeonato se juegue en Estados Unidos hace aún más favorito al Tri. “Nosotros nos trazamos un objetivo y en lo personal, cuando no lo alcanzo significa que fracasé”, acepta. “Mas esto no quiere decir que el fracaso sea malo”.
Layún se explica… ”A ver, tenemos una ilusión, ganar el torneo y si no lo logramos hay un fracaso, ya dependerá de cada quien dimensionarlo. En lo particular, no le tengo miedo a esto, a esa palabra”.
El ejemplo que pone el rubio jugador es sencillo. En 2009, Miguel Arturo sorprendió a propios y extraños al volar a Italia para jugar con el Atalanta. Apenas jugó dos partidos en el Calcio y regresó. “Eso para mí fue un fracaso, en lo particular estoy acostumbrado a vivir así. Si no consigues lo que tenías en mente, no cumpliste la meta, y eso no significa que sea malo, lo he tomado como aprendizaje”.
Hoy es el principal pasador del Tri. “Cualquiera de nosotros sabe meter centros, somos jugadores de Primera División y estamos capacitados para eso, pero la diferencia pasa por la confianza”, confiesa.
En Portugal puso 19 pases en el torneo recién concluido. “Desde que estaba en América era un trabajo constante el centrar. En Europa me habitué a dejar de buscar la cabeza del jugador”.
La ecuación es sencilla. “Cuando quieres buscar el pase exacto, a la cabeza de tu compañero, terminas por no poner la pelota como debes, me enfoqué más en buscar el hueco, para que el balón llegue y el porcentaje ha crecido”.
