De visita en Querétaro, Swami Paramtej habló de la respiración, la meditación y la importancia de servir a los demás como principales claves para la paz y la felicidad.

Swami nació en una familia hindú, y a los 10 años comenzó a meditar; ha llevado sus conocimiento a más de 40 países de Asia, América del Sur, Europa y África. Ahora está en una gira “Por La Paz” en Latinoamérica y especialmente llegó a México para unirse a la campaña “México Merece Paz”, impulsada por El Arte de Vivir (AOL).

En entrevista con EL UNIVERSAL Querétaro, Paramtej dijo que la espiritualidad se debe inculcar a niños y jóvenes, para que aprovechen todo su potencial, esta práctica es esencial para todos, incluso los políticos.

¿Cuál es en concreto el mensaje para México, siendo que el país está atravesando por muchos problemas de violencia?

México es un país hermoso que tiene raíces fuertes, sus raíces son de miles de años atrás, y tiene tal belleza natural, que sólo tenemos que trabajar este aspecto ligeramente negativo con la violencia, con el narco, y debemos proyectar una imagen distinta a la que tiene México porque hay gente hermosa. La violencia tiene un efecto negativo pero sólo son unas cuantas personas que están haciendo esto, así que simplemente tenemos que elevar los aspectos positivos del país alrededor del mundo, sólo tenemos que lograr que México sea un país libre de violencia y estaría arriba del mundo.

¿Se habla mucho de paz desde el aspecto político, debe existir un trabajo en conjunto?

En el mundo actual necesitamos espiritualizar la política, la espiritualidad significa cuidar y que te importen los demás, el problema es cuando los negocios se meten en la política, si los políticos se vuelven espirituales habrá una gran transformación. El líder de India es espiritual. Cualquier persona con una fortaleza de este tipo va a pensar en todos, sin favorecer a alguien, considerará hasta la última persona para que sea feliz, no va a beneficiar solamente a algunos, la espiritualidad significa incluir a todos, es la necesidad que hay hoy en día. Para ser espiritual sólo necesitas aprender a respirar y meditar, que puedas tener una forma de conectar contigo mismo, a veces en la vida siempre nos estamos enfocando afuera, pero todo está adentro.

En el caso de los jóvenes, ¿cómo trabajar para llegar a un estado de paz? Porque, aunque suene a cliché, ellos son los que van a gobernar a futuro, dirigir e integrar la sociedad.

Tenemos programas especiales para los jóvenes, para canalizar esa energía, ellos deberían explorar todo ese potencial y saber cómo controlar la parte emocional que llevan, si tienen claridad en la mente y la forma de trabajar el enojo y las emociones, pueden hacer maravillas en este mundo, tenemos programas que ayudan a darse cuenta de su verdadero potencial; pueden hacer mucho en la sociedad.

Los jóvenes están muy en contacto con las redes sociales, pero el Internet puede ayudar y no, ¿cómo utilizar estas herramientas para encaminarse a la paz y felicidad?

La juventud de hoy es muy lista por todo el conocimiento que ya tienen, pero demasiada información al mismo tiempo, afecta al cerebro, lo hace muy letárgico y también drena mucho la energía, lo que realmente la juventud necesita saber es cómo elevar ese nivel de energía que tiene, ellos quieren hacer más y más, entonces sí, hay que subir ese nivel de energía para que logren todo lo que quieran, ellos son el futuro.

¿Cuáles serían los tres puntos principales para encaminarnos a este mundo de paz?

El primero, tener una forma de liberarte de todo el estrés, porque si tú no tienes estrés en tu sistema, tienes claridad de mente, la gente que hace algo malo no está consciente de lo que está haciendo; lo segundo es que todos deberían empezar a servir, siempre estamos pensando qué hay de mí, cómo lo voy a lograr y yo qué beneficio voy a obtener, hay que empezar a servir. Y el tercero: celebra. Sonreímos y servimos, meditamos y celebramos.

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