“Las muchas promesas disminuyen la confianza”. Horacio
Leo en la prensa local diversas notas, de diversos colegas, que hablan de lo que declaró o hizo tal o cual delegado del gobierno federal.
Que la encargada del despacho de la Delegación de la Secretaría de Desarrollo, Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), Shantall Valdez Cabrera, habló del proyecto fracasado de la Ciudad de las Mujeres.
El mes pasado se informó de la designación del nuevo delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), nombramiento que recayó en la persona de Fabián Bernardo García Olvera, en sustitución de Manuel Alejandro Ruiz López.
También ha estado muy activo el Director del Centro SCT Querétaro, Efraín Arias Velázquez, quien apenas el pasado 6 de marzo dio a conocer la realización de obras de reconstrucción de la Autopista 57, entre el estadio Corregidora y la Plaza Comercial Galerías, en la salida a Celaya.
Estos son apenas unos botones de muestra para entrar el tema que nos ocupa hoy en este espacio.
De acuerdo con datos oficiales, hoy en Querétaro existen 59 delegados federales o encargados de despacho y, en ningún caso, el titular de la misma ha sido eliminado; y a ello debemos agregar que tenemos además un Delegado Especial de Programas Sociales del Gobierno federal que recae en la persona del exrector de la UAQ y senador con licencia, Gilberto Herrera Ruiz.
El 12 de julio del año pasado Andrés Manuel López Obrador dio a conocer a sus diputados y senadores electos la eliminación de las delegaciones federales en los estados. (EL UNIVERSAL, 12 de julio de 2018).
En conferencia de prensa, AMLO reveló que los titulares de todas las delegaciones federales serían sustituidos por 32 coordinadores estatales de programas de desarrollo.
El objetivo, aseguró López Obrador en ese momento, era reducir la burocracia del gobierno federal.
“En el caso de las delegaciones que hay en los estados, que tienen hasta 20 delegaciones federales, es mucha burocracia y muy bien pagados, entonces se van a quitar, pero se va a respetar a los trabajadores de base”, indicó López Obrador según lo reportó esta casa editorial.
Han pasado ocho meses desde aquél anuncio y, cuando menos en Querétaro, esa oferta de reducción burocrática y ahorros económicos no ha visto la realidad.
Tenemos eso sí, un superdelegado que tiene poca actividad pública aunque probablemente sí trabaje aunque no se vea, que se vincula con el gobierno estatal para el adecuado desarrollo de las políticas públicas, aunque no parezca y tenemos, también, una alta burocracia federal que lejos de disminuir y adelgazar, ha engordado con la creación de esa nueva superdelegación.
Esa promesa en particular para el caso de Querétaro no se ha cumplido y obliga al cuestionamiento al gobierno federal, al Presidente de la República y al mismísimo superdelegado.
¿Por qué la alta burocracia federal en Querétaro ha sido intocada? ¿A qué obedece el que las delegaciones federales sigan contando con titulares que cobren cada 15 días un salario que implica una sangría financiera a las arcas públicas y que el mismo Presidente López admitió que era excesiva? ¿Cuánto puede tardar la reestructuración de la representación del Gobierno federal en un estado como Querétaro? ¿No les han alcanzado 8 meses para hacer realidad la promesa del Presidente de la República?
Yo ahí dejo mis dudas.
El último párrafo
De acuerdo con el Reporte sobre las Economías Regionales Octubre – Diciembre 2018 del Banco de México (Banxico), durante el último trimestre de 2018, la actividad económica en México mostró una importante desaceleración con relación al trimestre anterior, la cual podría prolongarse hacia inicios de 2019, reflejó tanto de la desaceleración de la economía global, como de una mayor debilidad de diversos componentes de la demanda interna, y algunos factores de carácter transitorio. Dicho en otras palabras: México cerró el 2018 en recesión y el panorama no pinta mejor en 2019.
