Un fantasma recorre América Latina, el fantasma de la izquierda... no pude evitar usar esta cita de Marx y Engels para escribir sobre el triunfo de Lula en Brasil con lo que las principales economías de la región están gobernadas ya por partidos de izquierda o que se autodenominan como tal.

El péndulo de la política latinoamericana ha girado a la izquierda, si bien es cierto que no es la primera vez que esto sucede, sí es la primera vez que sucede en casi todo el subcontinente de manera casi coordinada.

Nuestros países han tenido procesos sociales similares desde la colonización española, por eso en 1810, sin que existieran los canales de comunicación actuales, casi al unísono, se buscó la independencia de la metrópoli española. En el siglo XIX, América Latina padeció el caudillismo y las dictaduras carismáticas: Desde Santa Anna y Díaz en México hasta Juan Manuel de Rosas en Argentina.

El siglo XX marca ya una diferencia entre los procesos de México y el resto de América Latina: La revolución mexicana va a marcar una diferencia con Sudamérica que el siglo XX vivió una serie de golpes de Estado y sus consecuentes dictaduras militares.

A finales de siglo vino la ola democratizadora y a mediados de la primera década del 2000 una primera ola de gobiernos de izquierda se asentó en la región. Sin embargo, el que fueran de izquierda no significa que fueran homogéneos en su forma de ejercer el poder. Fue muy distinto el régimen de Chávez en Venezuela al del primer Lula en Brasil o Bachelet en Chile. México no fue alcanzado por esa ola porque López Obrador perdió su primera elección presidencial por un margen de .56 por ciento.

Esa primera ola de gobiernos de izquierda se vio beneficiada en lo económico por la demanda de materias primas tanto de la emergente economía de China como la demanda petrolera de las potencias europeas. Por ello, Lula tuvo resultados favorables para abatir el hambre en Brasil y hasta se dio el lujo de construir estadios para albergar unos Juegos Olímpicos como un Mundial lo cual, paradójicamente, generaron descontento por el despilfarro.

Este domingo, Lula ha vuelto al poder en Brasil tras haber sido acusado de corrupción y ser encarcelado. Con esto, las principales economías de Latinoamérica están bajo el mando de la izquierda.

Sin embargo, ahora el panorama económico no es como el de hace 15 años donde hubo una fuerte demanda de materias primas que permitió una derrama económica, por el contrario, el escenario es de recesión económica e incertidumbre global tras la pandemia y la escasez e inflación, derivados parcialmente de la invasión rusa a Ucrania.

El fantasma de la izquierda ya se ha asentado en Latinoamérica.

Periodista y sociólogo. @viloja