Se acerca el día de la jornada electoral, estas elecciones han causado curiosidad, expectativa e interés en los ciudadanos que urgen un cambio, exigen una mejor gobernabilidad, justicia, educación, salud, infraestructura, transparencia y visión de país.

Los ciudadanos mexicanos ejerceremos el derecho y la responsabilidad de decidir con nuestro voto a qué personas y a qué partidos encomendamos la gestión de los asuntos públicos de nuestra nación. Somos responsables en la elección de nuestras autoridades.

A los electores le preocupa el contexto social con graves signos de corrupción e impunidad, por lo tanto, están observando, considerando y analizando a los candidatos y sus propuestas. El criterio y la decisión de los votantes serán los que lleven a buen puerto esta elección. Mediante el voto se expresará qué tipo de representantes que quiere la población, y negaran su voto a quienes defraudaron sus expectativas.

Como ciudadanos debemos hacernos las siguientes presuntas antes de emitir nuestro voto: ¿Qué nivel de bienestar queremos? ¿Cómo lo podemos obtener? ¿Qué gobernante buscamos? ¿Quién de los candidatos tiene estas características? Por lo tanto, hay que elegir a quien conoce realmente las necesidades de la población. A quien cuenta con capacidad intelectual y profesional para saber interpretar esas necesidades de la gente.

También es importante conocer quién es el candidato y su equipo. Optar por quién es transparente, honrado y con capacidad. Conocer bien su plan de gobierno. El candidato que promueve una vida plena, la dignidad de la familia, la libertad y una buena educación integral.

Es decir, dar un voto consciente y responsable.

La conciencia lleva a darse cuenta cómo se afecta al otro con tus pensamientos, tus palabras y tus acciones. Cada cosa que haces incide en alguien y ese alguien se queda impactado en positivo o en negativo. Ser consciente es estar de tu lado observando tus acciones y resultados.

Votar es tanto un derecho como una responsabilidad de cada ciudadano, pero también es un ejercicio de conciencia plena pues tiene repercusiones en nuestro entorno, en nuestro país. El nuevo rumbo de nuestra nación tiene que ser decidido por mexicanos y mexicanas pensantes. Votar de manera razonada implica investigar a detalle la historia y las propuestas de los candidatos y sus partidos, las personas más cercanas.

Ir a las urnas con una reflexión previa, amar a nuestro país y participar, de manera decidida, en el rumbo que habrá de tomar. Vamos a elegir al presidente de la República, ¿Qué candidato garantizara un mejor nivel de vida, educación y libertad?

Un buen presidente debe tener claridad del rumbo que le quiere dar a su gobierno, de las acciones que hay que realizar para lograr los objetivos planteados y de los apoyos que requiere para tal fin. Debe dar nuestras permanentes de liderazgo.

Meade se perfila para ganar la elección del 1 de julio de 2018. En la encuesta realizada en la segunda semana de junio por Pop Grup, se hizo la siguiente pregunta: “Y aunque usted todavía no decide por quién votar ¿Con cuál de los siguientes candidatos se siente más identificado? El 38% contestó que por Meade, 26% con Anaya, el 10% con López Obrador y el 1% con Jaime Rodríguez.

Meade tiene un estimado de 8 millones 400 mil votos duros, él ha conseguido 2 millones 790 mil de votos blandos, pero ha logrado convencer a la mayor parte de los indecisos, al 38%, lo que representa 3 millones 833 mil, lo que le da un total de 17 millones 461 votos, el 31.5%, que lo pone a 3.9% del puntero.

Sufragar es participar en una decisión. Y, para prepararnos para elegir a quienes gobernarán nuestro país durante los próximos años, debemos reflexionar, el futuro del país demanda un voto profundamente razonado, que ponga la mirada en el bienestar social.

Estamos a tiempo de emitir un voto consciente por alguien trasparente, honesto y que sabe hacer las cosas.

Ex presidente municipal de Querétaro. @Chucho_RH

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