En la preparación del proceso para la elección de rector(a) para el periodo 2000-2003, de acuerdo a la normatividad vigente, Ley Orgánica y el Estatuto Orgánico de nuestra Alma Mater, se procedió a realizar la convocatoria correspondiente, para lo cual previamente se establecieron acuerdos para dirigir el proceso de elección y facilitar la adecuada transición, así como las conciliaciones necesarias para asegurar la transparencia y la equidad entre los aspirantes al cargo, proscribiendo la utilización de recursos no acordados.

Se favoreció y se organizó la participación de los estudiantes y de la comunidad académica en el proceso electoral, también se acordó la comparecencia de los aspirantes registrados ante la comunidad universitaria, para la presentación de sus propuestas de trabajo. Se nombró una comisión electoral por del H. Consejo Universitario y ante ella se inscribieron los aspirantes, verificándose el cumplimiento de los requisitos establecidos en la legislación universitaria.

Los dos aspirantes registrados fueron la M. en C. Dolores Cabrera Muñoz y el M. en C. Salvador Lecona Uribe, Directora de la Escuela de Bachilleres y Secretario Académico de la UAQ, respectivamente, previo al inicio del proceso electoral.

Recuerdo, a manera de anécdota, que un directivo de mi administración en la rectoría, pretendía registrarse para participar como candidato al cargo de rector, ciertamente se trataba de un académico y funcionario respetable de nuestra universidad. Sin embargo, al enterarme de su pretensión y con toda la estima y confianza que le tenía, pasé a su oficina para advertirle amablemente que él no podía ser candidato al cargo, porque no cumplía uno de los requisitos de la legislación universitaria en la materia, al  momento de la elección.

En respuesta, me expresó que sabía que se habían hecho excepciones en el pasado, a lo cual le respondí que la legislación de la UAQ había sido instituida por el H. Congreso del Estado de Querétaro. Así las cosas, le señalé que no era viable su registro como candidato y que no estaba en mis facultades, ni en las de la comisión, o en el H. Consejo Universitario, eximir ningún requisito; lo que pretendí cuando visité amablemente la oficina del estimado directivo, fue evitarle un desgaste innecesario, porque no veía factibilidad de que pudiese prosperar en su pretensión. Tengo en mi memoria que no recibió con agrado lo que le expresé de buena fe, me señaló que él tenía el apoyo de cierta organización, para lo cual no realicé comentario alguno.

El proceso se llevó a cabo en orden y en un ambiente de respeto, sólo se registraron los dos candidatos arriba citados, la comunidad estudiantil emitió su voto en cada facultad y en la Escuela de Bachilleres, de la misma manera lo hicieron los académicos universitarios; los consejos académicos enviaron las propuestas correspondientes y en el H. Consejo Universitario se concluyó con la votación eligiendo para la rectoría a la M. en C, Dolores Cabrera Muñoz. Así las cosas, el 14 de enero de 2000 la M. en C. Dolores Cabrera Muñoz tomó protesta ante el H. Consejo Universitario, para cumplir el periodo 2000-2003.  (Continuará)

Ex Rector de la UAQ 
zepeda@uaq.mx 
jalfredozg@yahoo.com.mx

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