El viernes el nuevo gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri González, tomó posesión del cargo por el que fue electo en junio pasado. Se trata de un nuevo gobierno panista en la entidad y, en este caso, la continuidad del proyecto blanquiazul. ¿Cómo se puede analizar la nueva administración en el estado?

Poco a poco han iniciado los cambios de gobierno que se conoció que habría tras las elecciones de junio. En varios estados se presentaron transiciones políticas. En este contexto, en Querétaro se inserta el componente de la continuidad en el estado con este proyecto panista encabezado por Kuri. No obstante, de entrada, el gobierno recientemente formado enfrenta retos que no fueron atendidos por la pasada administración, otros que fueron administrados, pero no solucionados, y algunos más que son nuevos. En todos, los funcionarios deberán prestar especial atención para dar soluciones lo mejor y más pronto posible, puesto que, además, el tiempo en la política es sumamente apremiante.

Tras vencer de manera contundente en las elecciones pasadas, obteniendo el doble de votos que el partido político que le seguía, Kuri finalmente se convirtió en gobernador de Querétaro. Su trayectoria en la política ha sido interesante, incluyendo cargos de presidente municipal, senador y, ahora, gobernador, todos participando desde el Partido Acción Nacional.

La toma de posesión se suscitó en uno de los recintos queretanos más emblemáticos: el Teatro de la República. Personajes de la talla de Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, Miguel Mancera, exjefe de Gobierno de la CDMX y actual diputado federal, y otros legisladores se dieron cita para acompañar el inicio de la nueva administración gubernamental. Esto evidencia justamente la importancia de Querétaro en el país, pero también la posición de Kuri en la política nacional.

También, desde el recinto anteriormente llamado Teatro Iturbide, el nuevo gobernador ofreció un discurso conciliador y para toda la población en Querétaro. Esto resulta particularmente relevante por varias cuestiones. A diferencia de los sistemas parlamentarios, en sistemas presidencialistas el partido en el poder suele gobernar para sí, es decir, para sus militantes y la gente que lo apoya, colocando en un segundo plano a los demás partidos políticos y sus apoyadores.

Esto causa un problema en la práctica democrática, puesto que se discriminan las ideas de otros agentes en la sociedad y la colaboración se restringe. Por ello, el discurso de Kuri fue muy interesante. Éste fue conciliador y ofreció un ánimo de unidad en la población de Querétaro, alejando los comentarios desproporcionados, divisorios y de resentimiento que algunos otros políticos utilizan como estrategia insana para generar combate y polarización en el país.

Además de funcionar como un acto de apertura del nuevo gobierno, el discurso presenta una clara diferencia contra la polarización. Pero también evidencia un compromiso con Querétaro que nosotros como ciudadanos no podemos perder de vista. En las pasadas elecciones se eligió por mayoría el proyecto panista, situación que podrá gustar a algunos y a otros no, pero lo que es invariable es que el nuevo gobernante deberá rendir cuentas y nosotros deberemos estar al pendiente de escucharlas y exigirlas para que el contrato social se cumpla de la mejor manera posible.

@NielsRosasV (Twitter)
niels.rosas@gmail.com

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