A Víctor Roura lo han dado por muerto muchas veces, pero sigue vivo y muy optimista por su nuevo proyecto, con el que cerró 2017: Transgresiones, revista iniciada por Gustavo Sainz con Alejandro Zenker, el erótico mago de la lente, y cuya dirección general encabeza hoy este ícono del periodismo cultural. La revista, bimestral e internacional (Argentina, Colombia, España, México y Perú), es de literatura, cultura visual y eros. Su primer número apareció el 2 de octubre pasado, pero el temblor del 19 de septiembre lo atarantó todo (registros legales, protocolos de difusión y circulación).
Cuando estas líneas se publiquen, circulará ya el número tres con un homenaje a Eusebio Ruvalcaba en su primer año de fallecido. “Todos lo extrañamos, y si ustedes no hubieran venido, esta botella de vodka me la estaría tomando solo… recordándolo”, dijo con nostalgia Víctor Roura ante José David Cano y este reportero. Ese día se recordaron anécdotas etílicas, literarias y de esa implícita debilidad que los hombres tenemos por las mujeres… También, por supuesto, la anécdota vivida por Eusebio, en Oaxaca, con “Amaranta”, y que hace días comenté con el director editorial de EL UNIVERSAL Querétaro, por quien conocí personalmente al autor de En la dulce lejanía del cuerpo (Poesía, Oasis, 1996).
Al periodista cultural por excelencia, Víctor Roura, me acercó también José Antonio Gurrea, héroe de mil batallas, en una de tantas largas noches musicales de bohemia en su casa de la Ciudad de México. A Roura le ha caracterizado su capacidad literaria infinita (más de 50 libros publicados) y de ellos recuerdo el poemario Un ángel con su mirada hipócrita, que, en mensaje subliminal, repartí a cinco féminas hace ya tiempo.
Con su exquisito manejo de la palabra, sólo a Roura se le hubiera ocurrido reescribir un Atípico Abecedario Abrasivo: ejercicios escriturales eclécticos (Gobierno del Estado de México, Secretaría de Cultura, 2017), en el que las definiciones empiezan con la misma letra; será presentado en la 39ª Feria del Libro del Palacio de Minería (22 de febrero al 15 de marzo) por Agustín Ramos, autor de La sal de la tierra (Universidad Veracruzana, 2013) y Anamari Gomís, ensayista y narradora. La versión 2009 la publicó Cofradía de Coyotes.
De la “A” rescatamos, para los lectores de EL UNIVERSAL Querétaro, un fragmento de “Ámame, amorosa amiga” (Edición 2017, página 21):
Ámame amigablemente, amor, aunque ansíes abiertamente ardorosos apasionamientos.
Ámame atenuadamente, amor, aplicando ansiedades aminoradas.
Ámame aforísticamente, amor, aunque abrevies acaloradas arremetidas.
Ámame aquiescentemente, amor, arrullándome aniñadamente.
Ámame afónicamente, amor, acallando alientos artificiales.
Ámame abrazadoramente, amor, aduciendo atribulada afectación amnésica.
Ámame aviesamente, amor, absolviéndote arteramente…
De él se ha escrito tanto y tanto ha sido su esfuerzo por dignificar el periodismo cultural del país que, inexplicablemente, periódicos como La Jornada, Reforma y otras publicaciones como Proceso han denostado su aporte y celebrado, prácticamente, la cancelación de sólidos proyectos periodísticos como “De largo aliento” y “La digna metáfora”.
El próximo noviembre Roura cumplirá 46 años de ejercicio periodístico y en ese momento la cultura tendrá nuevo administrador, en función de quien gane la lotería sexenal. Ahí veremos cómo se ajustan los ejes de algo que muchos ya ven como perdido: la cultura. En las campañas políticas y la administración que al fin termina, se ha evidenciado el gran vacío cultural. Olvidando esta bandera, los candidatos regresan lastimosamente al pueblo a convencerlos de sus intenciones políticas para después, como ha sido por años, tratarlos con desprecio.
El viernes 2 de marzoserá la presentación de Atípico Abecedario Abrasivo y esperamos que la asistencia sea muestra del repudio por el abandono por parte de políticos y empresarios de la comunicación hacia las expresiones culturales verdaderas.
