Este asunto de la inflación en la economía resulta para algunos de nosotros la repetición de viejas historias que comentábamos a nuestros hijos, no hace tanto tiempo, como recuerdos y anécdotas que no esperábamos que regresaran a nuestra realidad cotidiana en este tiempo que nos hacen falta buenas noticias.

El incremento de los precios de muchos productos y servicios, en especial el de los básicos para la alimentación de las familias, es uno de los puntos medulares sobre los que repercute y reduce el acceso a los mismos, lastimando más fuerte a quienes menos tienen. Las razones de origen vienen de múltiples causas, pero siempre recaerá en el movimiento de la oferta y la demanda.

Por ello, los mayores debemos aprender de nuevo las maneras de lidiar con este tremendo reto, mientras los jóvenes deben conocer a mayor profundidad las causas y consecuencias de una inflación alta que nos obliga a revisar costos y precios para establecer prioridades de aquello que nos permita resolver las necesidades más apremiantes y acercar lo deseable a lo posible.

Dicen que la economía es como el juego de sube y baja, algunas veces arriba, otras abajo, a veces bien o otras mal. En fin, el asunto es que cuando hay inflación, me parece que, como en la fotografía de esta ave picuda que asume la lógica de ver el alimento caer dentro de su pico, pero con la inflación, en ese sube y baja, se puede romper esa regla y, en lugar de acercarse, tristemente se aleja. Ojalá y que encontremos la mejor manera para resolver y controlar este bicho económico que también nos afecta en este Querétaro nuevo que deseamos conservar.

@GerardoProal