El resultado de la votación de la consulta popular “nacional” convocada por el equipo del Presidente Electo, Andrés Manuel López Obrador, es muy fácil de vaticinar, por varias razones, entre las cuales pueden destacarse las siguientes:

En primer lugar, la gente que asistirá a votar la consulta popular convocada será fundamentalmente aquella que votó por Morena y por quien la encabezó, que es el ya presidente electo Andrés Manuel López Obrador, lo cual permite predecir, sin mayor dificultad, que apoyarán una de sus propuesta de campaña, que consiste en cancelar el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAIM) que se está construyendo en Texcoco, así como llevarlo a cabo en la base militar de Santa Lucía y reacondicionar el actual aeropuerto de la Ciudad de México así como el de Toluca.

En segundo lugar, los ciudadanos que no votaron por Morena en la elección presidencial pasada, difícilmente acudirán a votar, porque no están de acuerdo con la citada convocatoria; también saben que no lograrían los votos necesarios para que la propuesta ganadora fuera la continuación el NAIM en Texcoco.

En tercer lugar, una parte importante de los ciudadanos está consciente de que la decisión de continuar o no las obras en Texcoco, así como la de tomar en cuenta la otra alternativa, no es un asunto que deba someterse a votación. La decisión debe estar sustentada fundamentalmente de forma técnica y financiera, con los pros y contras, esto es, que el titular del Ejecutivo debe asumir su responsabilidad considerando lo que es mejor para México, pues ya ganó las elecciones, ahora le tocará gobernar.

En cuarto lugar, muchos ciudadanos sensatos, a pesar de estar razonablemente enterados, incluso con preparación profesional en áreas relacionadas con la ingeniería y las finanzas, saben que no es posible disponer de toda la información y conocimiento necesario como para intervenir votando para que así se tome una decisión sobre dónde construir o no el AICM. De hecho, no es posible tener acceso a tan vasta información que se ha generado para el NAIM en Texcoco, y menos se dispone de información referente a la opción que se plantea para utilizar el aeropuerto en Santa Lucía. Los ciudadanos tendríamos que convertirnos todos en expertos en diversidad de campos del conocimiento de algo tan complejo y de tanta trascendencia como lo que involucra el NAIM.

Puede anticiparse, que la votación que se lleve a cabo del 25 al 28 de este mes de octubre, dará por resultado que la propuesta ganadora es la que apoya Santa Lucía y anula el NAIM en Texcoco.

Quisiera equivocarme, pero todo hace ver que la línea ya está trazada, así se pretende legitimar la decisión, mal para México y para una administración que está por iniciar y que mucho ha prometido, mal ejemplo del ejercicio de la democracia participativa, las funestas consecuencias serán para todos.

El viernes y el sábado pasados se llevó a cabo un simposio de mecánica de suelos no saturados en el Campus Juriquilla de la UAQ, la conferencia la impartió una investigadora del Instituto de Ingeniería de la UNAM que participa en los estudios y realización de las obras de precarga y drenaje del subsuelo que se realizan en el terreno del NAIM, para acelerar los asentamientos del subsuelo, asegurando la funcionalidad de las pistas y de la zona de andenes, así como la adecuada cimentación de la torre de control. Se realizaron muchas preguntas y respuestas sobre el caso, no queda duda, se tiene la participación de expertos en el NAIM.

La pretensión de esta consulta popular y sus resultados es inadmisible para la toma de decisiones que corresponden al ámbito técnico y a la responsabilidad de gobernar, se trata de una farsa burda en todas sus componentes.

Google News