El recorte presupuestal 2017 que ha propuesto la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) al Congreso de la Unión seguramente está bien pensado. Considerando el entorno económico global y la situación nacional, el proyecto de presupuesto se explica como una medida responsable y prudente de la administración federal, la cual resulta no grata porque reduce perspectivas de desarrollo en los próximos años. La reducción presupuestal se ha venido dando desde 2015.

Como una de las medidas para hacer frente a las consecuencias económicas de la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, el gobierno mexicano decidió en este año aplicar un segundo recorte al gasto público, de 31 mil 715 mdp, lo que impactó a la educación pública con 6 mil 500 mdp y con mil 800 mdp al Conacyt.

La disminución del gasto público proyectada para 2017 tiene aspectos positivos pues pretende evitar el crecimiento de la deuda pública y ajustarse a los ingresos esperados en observación de los precios decaídos del petróleo; pero también tiene aspectos poco favorables a la economía mexicana, porque ella depende, en cierta medida, de la inversión pública.

El recorte presupuestal considerado para 2017 resulta histórico, de los mayores acontecidos, sumado a los precedentes de 2015 y 2016. Para 2017 se propone reducir 239 mil 700 millones de pesos, que equivalen al 1.2% del PIB, previendo la SHCP un crecimiento económico del 2.5%. Se pretende lograr la contención de la espiral de endeudamiento y registrar un superávit primario para 2017. El titular de la SHCP, José Antonio Meade, ha señalado que el paquete económico es responsable, realista y con alta sensibilidad social y que presenta un ajuste consistente con la consolidación fiscal establecida desde 2013.

Con este proyecto de presupuesto se afectarían notoriamente diversas secretarías, entre las que destaca Medio Ambiente y Recursos Naturales, que recibirá 37.6% menos dinero, impactando compromisos estratégicos como el combate al cambio climático, reduciendo recursos en 21% para pasar de 44 mil 532 mdp a 35 mil 55 mdp. La Secretaría de Turismo tendría 35% menos de presupuesto, lo cual no parece ser lo más acertado, porque el turismo representa una de las fuentes de divisas más promisorias para la economía de la nación.

El futuro de una nación depende en gran medida de su capital humano, es lo que se forma a través de la educación. Asimismo, el desarrollo científico y tecnológico distingue a las naciones más avanzadas, con mayor ingreso per cápita y poder adquisitivo, así como desarrollo sustentable y calidad de vida. La Secretaría de Educación Pública tendrá 14% menos de presupuesto en el proyecto 2017, esto es una reducción de 37 mil 282 millones de pesos, lo cual resulta desventajoso para el mejor futuro del país que deseamos construir los mexicanos. La educación de calidad es una de las mejores inversiones a realizar.

La Universidad Autónoma de Querétaro ha visto reducirse en 65% su acceso a los recursos extraordinarios provenientes de concursos del gobierno federal, cita el Rector, doctor Gilberto Herrera Ruiz. Situación similar se está padeciendo en la generalidad de las instituciones de educación superior públicas del país. El proyecto de presupuesto federal para la educación no resulta favorable para poder atender el crecimiento y la mejora de infraestructura educativa que se requiere, así como para elevar la calidad. De esta manera, los recortes al presupuesto federal sí afectan a Querétaro, no solo en educación, sino también en el cuidado del medio ambiente, recursos naturales y turismo, entre otros.

Recuérdese que uno de los primeros impactos de los recortes de presupuesto federal en 2015 fue la suspensión del Tren de Alta Velocidad México-Querétaro.

Ex Rector de la UAQ.zepeda@uaq.mx

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