Ha pasado en otros torneos y los niveles de audiencia nacional dan la razón. La poca popularidad de los Tigres y el León a niveles globales, aunado a que el partido de vuelta solamente se verá en televisión restringida, llevará a una definición del título discreta, poco popular.

Por eso es importante para los equipos aprovechar el partido de hoy, donde la televisión abierta será su cómplice, ese mercado de más de 65 millones de televisiones que tiene este país y donde no se necesita pagar un solo centavo para ver el futbol. El domingo, las cosas cambiarán, porque el mercado de TV de paga que ha venido decreciendo ofrece solamente por ahí de los 14 millones de suscriptores.

El futbol es una herramienta maravillosa para captar clientes para la TV de paga, aunque con la convergencia tecnológica, naturalmente, va a la baja. Solamente después de la Copa del Mundo de Rusia 2018 cancelaron su servicio satelital 125 mil personas;  claro, ya no tenían que pagar para seguir viendo futbol. Y así, al darse cuenta el gran público que la televisión abierta ofrece tantos canales gratuitos combinado a las OTT que se ofrecen en las pantallas inteligentes, no hay razón para seguir pagando una suscripción que encadena a un tiempo forzado.

Sin embargo, sin estos canales de televisión restringida sería imposible que el futbol existiera como lo conocemos en nuestros días. Contratos multimillonarios pagan por derechos de transmisión en búsqueda de clientes que puedan aportar lo invertido. Por eso Disney apunta a tener todo el streaming deportivo del continente; es más, del mundo. Saben que por una cuota mensual la gente se suscribirá a su plataforma sin necesidad de tiempos forzosos, cables, antenas, etc. Y así pasa ya con Fox Sports en la actualidad en México, que puedes ver su canal sin  necesidad de estar suscrito a un sistema satelital o de cable.

Por eso el futbol cambia, pero eso no quiere decir que encuentre la popularidad deseada en este tipo de partidos. Ricardo Ferretti puede convertirse en el máximo ganador de la historia si logra su séptimo título, empatando al legendario Nacho Trelles, mientras que el León estará intentando empatar al Cruz Azul como el cuarto más ganador de la historia de títulos. Si a esto le agregamos que los Tigres tienen uno de los planteles más costosos y los del León uno de los más talentosos, es injusto que no tenga popularidad esta final.

El Tuca podrá mandar la imagen de que es un técnico conservador, pero nadie puede quitarle la etiqueta de ganador. Muchos entrenadores quisieran estar en donde Ferretti, el amo y señor de los Tigres; no sólo en el banquillo, sino en el arado, estructura y fisionomía de un equipo de futbol extremadamente exitoso en la última década.

Y de Ambriz, injusto es quien lo califica de defensivo. Un entrenador que supo evolucionar, tener autocrítica y que encontró con su honradez profesional un excelente lugar como León para demostrar que sí hay segundas y hasta terceras oportunidades en el deporte. Así que por más decremento de la televisión de paga, por más que sea una final de interés regional, hoy y el domingo tendremos muy buen nivel en el campo, así que no sólo por popularidad se rige este deporte.

@gvlo2008
gerardo.velazquez@eluniversalbgwire.com.mx

Google News