Tanto Querétaro como Puebla en su momento han sido estados potenciales mientras ha gobernado el Partido Acción Nacional. Sobran los ejemplos.

En Querétaro, durante el gobierno de Pancho Domínguez se han trabajado proyectos para crear infraestructura, como la mejora de escuelas, vialidades y la ampliación de los diversos servicios que brinda el gobierno estatal, como la construcción de un nuevo Hospital General, además de acciones en favor de la Sierra Gorda, población que por anteriores administraciones se encontraba abandonada.

En el caso de Puebla, mientras gobernó el panista Rafael Moreno Valle (QEPD) el estado dio un giro de 180 grados, prácticamente mejoró los indicadores en casi todos los rubros, se incrementó la matrícula en educación superior, la infraestructura fue fundamental, pues con esto se consiguieron mejorar los accesos, carreteras, la línea ferroviaria, agua, drenaje, estabilidad laboral, todos estos puntos fueron trascendentales para la llegada de más inversión extranjera, así consiguieron pasar del 25avo hasta el 4to nacional.

¿Qué pasa ahora en Puebla con un gobierno de Morena? los bolsillos de los poblanos han sido lastimados con nuevos impuestos, el gobernador

Luis Miguel Barbosa colocó amigos en la Comisión de Derechos Humanos, la inseguridad ha incrementado y la economía, con su gestión, “se ha estancado”. Y, por si fuera poco, no ha presentado ningún informe sobre el trabajo realizado por su administración, la cual se ha calificado como “un año lleno de pleitos y cero obra pública”.

Incluso sus diálogos para con la población son absurdos, muy de la calidad del presidente López Obrador, quien en muchas mañaneras para informar sobre la pandemia se dedicaba a encomendarse a los santos. Barbosa, en una conferencia de prensa, declaró que “los pobres estamos inmunes”, como si el virus distinguiera  clases sociales.

Carece de sensibilidad y hiere susceptibilidades, como cuando se refirió al incidente aéreo en el que murieron Martha Érika Alonso, gobernadora de puebla, y a Rafael Moreno Valle, exgobernador del mismo estado como un “castigo divino”. ¿En verdad los representantes de Morena son del “pueblo para el pueblo”? porque creo que para eso les falta un poquito de empatía y coherencia.

Los resultados de la elección extraordinaria del 2 de junio de 2019 anunciaban la llegada de un gobernador impopular, indeseado e impuesto por Morena y el lopezobradorismo. Aquí los resultados de esa decisión, pero la pregunta aquí es, Querétaro, ¿estás dispuesto a ser el nuevo Puebla?