El día miércoles pasado se reunió el Consejo de Concertación Ciudadana para el Mejoramiento Ambiental Sustentable, con el propósito de escuchar la conferencia del maestro Luis Fueyo Mac Donald, comisionado nacional de Áreas Naturales Protegidas, con relación a los avances del proceso Peña Colorada. El evento resultó muy fructífero y se llevó a cabo en el Auditorio de la Facultad de Ingeniería de la UAQ, en el Cerro de las Campanas, con la presencia y participación significativa de ciudadanos ambientalistas, académicos y funcionarios de los tres órdenes de gobierno.
Luego de la conferencia se generaron una serie de preguntas y respuestas con relación a los avances del proceso para lograr que Peña Colorada sea decretada como Área Natural Protegida, en su modalidad de Área de Protección de Recursos Naturales.
Entre otras cosas se trabaja en acordar lo pertinente con los propietarios de los 67 predios particulares (mil 369 hectáreas), se aclaró que los particulares, poseedores y ejidatarios, conservarán su tenencia, no se tiene considerada ninguna expropiación. En la superficie del polígono se tienen 293 parcelas ejidales y derechos de paso (659 hectáreas) y nueve zonas ejidales de tierras de uso común (2 mil 932 hectáreas).
El Programa Nacional de Áreas Naturales Protegidas 2014-2018 tiene el objetivo de mantener la representatividad de los ecosistemas de México y su biodiversidad. En las ciudades, las Áreas Naturales Protegidas (ANPs) sirven para tener un colchón amortiguador, coadyuvan a la captura de carbono y permiten conservar los sumideros de carbono, asimismo brindan un servicio con relación al agua, favoreciendo su infiltración al subsuelo y mitigando los escurrimientos que provocan inundaciones, desempeñando así una función de protección para la población circundante y para la infraestructura urbana, además de preservar el suelo. Tan solo en Peña Colorada, en la poligonal considerada, la lluvia que se acumula en un año es del orden 27 millones de metros cúbicos (Mm3) y la infiltración posible al subsuelo se estima en cerca de 3.6 Mm3, tomando como referencia los grados de infiltración para el tipo de terreno que se tiene, así como la precipitación media anual que en esa zona es de 555 mm anuales.
En cuanto a la contribución relacionada con el cambio climático, Querétaro no es ajeno a los impactos provocados por el calentamiento global, las principales causas que aumentan las concentraciones de bióxido de carbono en la entidad son la emisión de gases de efecto invernadero, la desforestación, los tiraderos de basura a cielo abierto, las concentraciones urbanas, la insuficiente cultura en el manejo de residuos sólidos, los patrones de consumo, al aumento de consumo de combustibles y los vehículos automotores y diversas emisiones contaminantes que llevan a que se generen 1.9 toneladas de CO2 per cápita, es decir, 3.26 millones de toneladas al año (Plan Querétaro 2010-2015). La vegetación que se tiene en Peña Colorada contribuye directamente como almacén de carbono con una biomasa de 3,858.790 megatoneladas de carbono, mientras que la cantidad de carbono atmosférico (CO2) absorbido se estima en 1,416.176 megatoneladas.
De acuerdo al artículo 45 en sus fracciones I a la VI de la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, Peña Colorada cumple lo establecido para el régimen de protección que se ha propuesto. Entre otras cosas, resguardará la vegetación en la zona como el bosque tropical caducifolio y el matorral subtropical, protegerá 171 especies de fauna y 257 de flora, preservando la variedad genética que representa, así como 16 especies (10 animales y seis plantas clasificadas en la NOM-056-Semarnat-2010) en alguna categoría de riesgo y especificaciones para su inclusión, exclusión o cambio-Lista de especies en riesgo.
Procurador del Medio Ambiente de Querétaro
