Triste pero cierto, pareciera que la llamada “oposición” trae la mira chueca, ya que sus mensajes, que casi siempre son ataques infructuosos al Presidente y a la Cuarta Transformación, parecen estar dirigidos, en su gran mayoría, directamente al Presidente o bien a los propios seguidores de la oposición y no a quienes en realidad debieran recibirlos y que es el electorado apartidista o “apolítico” y que es el que en una elección vota por un partido y a la siguiente elección vota por otro o que simplemente no vota. Electorado que, por cierto, representa el mayor porcentaje del padrón electoral.

En otras palabras, los líderes y voceros de la “oposición” atacan al Presidente y a su partido buscando debilitarlo —sin lograrlo—, o bien para posicionarse ante sus propios seguidores como “valientes y entrones” y así ganarse la siguiente candidatura o nombramiento. Todo ello olvidándose del electorado que no es seguidor de partido político alguno (“electorado apolítico”).

Es de destacarse que el Presidente, por el contrario, ya descartó convencer a los seguidores de la oposición sobre los supuestos logros y avances de la Cuarta Transformación y que sus mensajes se dirigen precisamente a ese numeroso “electorado apolítico”. Mensajes populistas que además hábilmente reviven resentimientos y corajes en contra de “los gobiernos anteriores neoliberales, fifís, conservadores, etc., etc.”, y que por tanto le generan simpatías. De ahí la alta popularidad del Presidente y su partido Morena.

Fuente de los Deseos: Ojalá que la denominada “oposición” abra los ojos y se dé cuenta que los ataques al Presidente como hoy los están haciendo son infructuosos. Ojalá cambien de estrategia y se decidan a enviar los mensajes que ese gran “electorado apolítico” está esperando recibir.

Exsenador