López Obrador insiste en ser el mejor para organizar movilizaciones sociales. No acepta la nueva realidad, la sociedad civil lo ha rebasado por la derecha en los desplazamientos sociales en su contra. Pretextos de AMLO para movilizar a sus seguidores, quienes han dejado de confiar en quien fuera el líder que encabezaba las demandas sociales más sentidas. En su calidad de Presidente de la República, solo puede movilizar mediante “acarreos” con recursos públicos, ni así logra igualar las fuerzas sociales organizadas.

Para conmemorar la expropiación petrolera lazó la invitación abierta a concentrarse en el Zócalo capitalino el 18 de marzo ¿Logrará llenar la plaza como lo hiciera la sociedad civil organizada el pasado 26 de febrero? Parece que no, el coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, anuncia que él y sus compañeros utilizarán parte de las prerrogativas para el “acarreo”, bajo el pretexto de la “soberanía energética y acompañar al presidente de cara al futuro del país”. Discurso rebasado en pleno Siglo XXI, cuando en el mundo automatizado todo ha cambiado; mientras que, a la 4T se le incendian las refinerías y no logra poner en funcionamiento la costosísima obra de Dos Bocas ¿Qué conmemora?

López Obrador dejó de ser el líder de los movimientos sociales. No es lo mismo ser presidente que un ciudadano demandante y respondón en contra de las malas acciones del gobierno en turno. Él es quien gobierna y no puede organizar marchas ni mítines en su contra. Por eso le surge la necesidad de los “acarreos masivos”, pretendiendo probar que aún conserva su fuerza política. Incluso sus tribus de morenistas se dividen.

Senadores de Morena no están dispuestos a utilizar, una vez más, dinero de sus prerrogativas, de suyo es dinero público no autorizado para “acarreos”; tampoco tienen tiempo para organizar las movilizaciones de sus estados para llevarlos a la capital de la República. La corcholata del Secretario de Gobernación, sospechosamente acudió al Senado de la República para instruir a los senadores sobre los temas de interés del presidente y los que pueden esperar. Mario Delgado convoca a gobernadores al “acarreo”.

AMLO quiere probar políticamente a los organizadores del movimiento social del pasado 26 de febrero, que él puede movilizar a grandes contingentes. Con cuentas alegres quedó mal en su cuarto informe de gobierno el 27 de noviembre, no alcanzó el objetivo de llenar el Zócalo, ni con músicos; lo abandonaron sus seguidores. El aparto de Estado es su sostén.  
Analista legislativo. @HectorParraRgz

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