La contrarreforma eléctrica de AMLO no será aprobada. Por ilegal es inviable la reforma a la Constitución, no solo violenta normas secundarias bajo las cuales empresarios privados invirtieron en la generación de energía eléctrica, también trastoca el T-MEC, Tratado Internacional que goza de jerarquía constitucional en el ámbito jurídico. AMLO sabe que no pasará en el Senado de la República, por inviable.

A los problemas jurídicos, acompasados con las violaciones a derechos de terceros, se alinea la escases de votos; continúa firme la alianza PAN, PRI y PRD, bancadas que no cederán sus votos, sin ellos es imposible la aprobación. A los votos en contra, se sumarán los 5senandores del “grupo plural”. La distancia para alcanzar las 2/3 partes se ve imposible de conseguir. Ricardo Monreal, coordinador de la bancada de Morena, muchos más negociador, si bien no tiró la toalla, adelantó que “podría sufrir modificaciones” la iniciativa del Presidente.

Los senadores del “grupo plural”, adelantaron que no votarán a favor de la propuesta, si esta no se modifica; acto que molestó al intolerante e intransigente promotor de la iniciativa. Aquellos pedirán audiencia con el Secretario de Gobernación, con la esperanza de cambiar la retrógrada contrarreforma energética.

No existe congruencia entre el contenido de la reforma, con el discurso presidencial, mucho menos con los intentos de justificar la misma por parte de la Secretaria de Energía. Queda claro que la pretensión de AMLO es de corte ideológico, nada que ver con abusos de empresarios, mucho menos con abaratar el costo de la energía eléctrica si regresa el control a la CFE, en todo el manejo del bien que es distribuido a 40 millones de usuarios. La misma promesa sucedió con el “gas bienestar”, ofrecieron abaratar el vital insumo y, en la práctica, en un par de meses el gas se fue al alza, no les falta la soez justificación: los precios internacionales del gas han subido.

El experto en la materia Joel Tonatiuh Vázquez Pérez, realizó un estudio detallado de la pretendida contrarreforma, desde la modificación de 2013, versando sobre participación de empresarios nacionales y extranjeros y la desincentivación de la inversión en lo que va del sexenio amloista. Concluye: favorece al monopolio de la CFE y desincentiva la inversión en energías limpias como la solar y eólica, traerá mayores costos en la generación, encareciendo la energía eléctrica. El perjuicio para la población es inminente y se fortalece el control del Estado.

Analista legislativo. @HectorParraRgz