Muy buen día, mis queridos lectores. El día de hoy voy a platicarles de una experiencia que me ha traído buenos dividendos,  la cual surgió de que me buscaron para llevar el hospitality de un festival llamado el 360 Revolution ska, un evento que reunía a la crema y nata del género que ha marcado una faceta llena de rebeldía y que, igualmente,   ha levantado una bandera en un asta muy alta.

Y bueno,  me contactaron pensando que sólo llevaba ese menester a los eventos, ya que nos conocimos con los organizadores pautamos la idea de ser parte de la imagen y para no hacer tanta bulla, me volví parte del 360 y comencé a participar en las promociones con bandas generacionales como la Sekta Core, la Nana Pancha, la Tremenda Korte, la Maldita Vecindad  y otras tantas más que engalanaban el gran recinto, que era un gran llano en la poderosa Huehuetoca, ya entrados en platica, anduvimos por casi toda la ciudad dándole a la promoción y debo admitir que fue un evento que me dio renombre, pues tuve la oportunidad de conducirlo alternando con otro gran locutor, pero debo decirles que andaba un poco desencanchado, ya que la última vez que tuve la dicha de conducir fue en lejanos ayeres en los Estados Unidos, pero no fue un impedimento porque al verme la banda que estaba ya reunida, alcancé a  escuchar a un mortal decir “¡Ahí esta el Pollo Rock!”, y ni tarde ni perezoso agarré el micrófono y me puse a saludar a todos y a  animar,  que más parecía cotorro en lugar de pollito.

La primera en presentarse fue la poderosa e indestructible Royal club, que después de su participación me dijo “Bien hecho, padre santo”, de ahí me fui como gorda en tobogán, tanto que me llevé hasta un “chichis pa’ la banda”, fue una gran tarde donde pude cotorrear con más de seis mil  asistentes al  evento.

Fue tanta expectación que se anunció la segunda edición, en la cual nos fuimos con más fuerza y logramos llegar a más corazones que me aceptaron y al igual a muchos que no les agradé tanto, como diría la canción del gran Cuco Sánchez, “No soy Monedita de oro”, pero  mientras se hable es ganancia y vamos, logré conocer a gente con un corazón gigante.

Ahora estamos a unos días de la tercera  edición y ando como pavoreal, ya en espera  de tomar, de nueva cuenta, participación en el poderoso 360 Revolution fest (le dimos un giro al ska y llegamos a más personas), esperamos reventar con  fuerza y talento como Silverio, Millonario, 2 minutos, La Lupita, entre tantos grandes que estarán presentes  y no quedará más que sacar el pecho y romperla, porque la tercera es la vencida y vamos con todo. Me  despido porque sin darme cuenta, se me acabó el papel y la tinta se derramó, nos leeremos en la próxima.

@pollorockmusica

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