La agresión al Instituto Nacional Electoral por parte del ejecutivo Federal es de tal magnitud que la sociedad se está organizando nuevamente para salir a la calle. Organizaciones civiles convocaron a una segunda movilización para defender la democracia y al Instituto Nacional Electoral (INE): ahora será una concentración masiva el 26 de febrero en el Zócalo de la Ciudad de México.

El objetivo es levantar la voz para defender la autonomía del INE, que no prospere el “Plan B” y, en su caso, que los ministros desechen una reforma inconstitucional. Este “plan”, busca desarticular al INE, plantea la reestructuración del Instituto, lo que implica la liquidación de trabajadores especializados en materia electoral y la remoción anticipada del Secretario Ejecutivo, que fue reelecto en 2020 hasta 2026, ya que se ordena la designación de un encargado de despacho para el periodo 2023-2029.

Un punto clave de la reforma es modificar las instancias de dirección del INE, se eliminará la Junta General Ejecutiva (JGE), desde donde se dictan directrices de ejercicio de presupuesto y criterios de organización electoral, en su lugar, se plantea crear una Comisión de Administración con cinco consejeros.

También se propone modificar el proceso de cómputo de votos, mismo que iniciaría desde las 18:00 horas del día de la elección, lo que hará innecesario un Programa de Resultados Electorales Preliminares. (PREP). La conclusión de cómputos de las elecciones se establece a más tardar el viernes siguiente a las elecciones.

Entre otros puntos de la pretendida reforma se encuentra que deberá extinguirse el Fideicomiso para el pasivo laboral y el de Infraestructura Inmobiliaria del Instituto. El primero será empleado para cubrir posibles indemnizaciones y liquidar a una parte del Servicio Profesional Electoral Nacional (SPEN).

Este SPEN actualmente integra las Juntas Locales Ejecutivas, que es el órgano del INE en las 32 entidades, así como a los consejos distritales donde hay personal especializado en Organización, capacitación y Registro Federal de Electores (RFE)

Adicionalmente, se propone que en vez de 300 consejos distritales sólo funcionen 260 de forma permanente y 40 se agreguen en elecciones.

Todos los cambios en la estructura del INE deberán hacerse con cargo al presupuesto ya aprobado y no habrá recursos adicionales.

La reforma establece que todo funcionario público del INE deberá sujetar su salario a la percepción del presidente y, por tanto, se deberán revisar los tabuladores salariales del personal a más tardar seis meses después de entrada en vigor la reforma.

Para algunos articulistas, este planteamiento es la ruta del fraude. Opinan que la reforma fue diseñada para dar ventaja al partido del presidente. Sobre todo la eliminación de PREP, pues sin este programa, se impide se conozca la tendencia ganadora la noche de la elección y facilita la manipulación del sufragio.

El ataque al INE y a sus consejeros es de tal magnitud que a la sociedad no le queda otro camino que salir a la calle a defender al instituto.

Es el llamado a una movilización nacional, por lo que se estima que son alrededor de 50 organizaciones sociales y civiles las que invitan a realizar réplicas simultáneas de la concentración central, pero en diversas ciudades de las entidades del país

El dato duro es que mientras se quiera alterar la esencia del sistema político electoral representativo del país, la reforma tendrá posibilidades. Lo que ha logrado la insistencia del presidente es lograr un bloque opositor cada día más consolidado en su contra.

Se ha demostrado que, cuando la sociedad participa ejerciendo sus derechos, no hay bloque autoritario que la contenga.

Expresidente municipal de Querétaro y exlegislador. @Chucho_RH

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