Lo más mediático es Míchel, lo demás es únicamente una demostración de desesperación, de no tener un proyecto con sentido.

Después del fracaso del torneo anterior, no vino una sacudida en los Pumas como se esperaba, las cosas lucen igual o peor, con la diferencia de que ahora hasta se han traicionado. Este club no está diseñado para pelear por la Liguilla, mucho menos es candidato al título, no existió tal revolución con la llegada de Jesús Ramírez como presidente deportivo y hay más riesgo de caer en los últimos lugares de la tabla porcentual.

Luego está el poco conocimiento que Míchel, como técnico del cuadro felino, tiene con relación al futbol mexicano. Porque por más que diga que conoce bien el balompié de nuestro país, por más que haya analizado a su equipo y rivales, y por más que pretenda tomar su experiencia como jugador del Celaya en la década de los 90, todavía le hace falta tener el conocimiento de la competencia a la que ha entrado de primera mano y eso le puede tomar tiempo, y costar puntos.

De los refuerzos ni hablar. El Club Universidad, el de la famosa Cantera, se reforzó con dos jugadores de las Fuerzas Básicas del Atlas. Ni siquiera se trata de elementos consolidados ni mucho menos. Juan Pablo Vigón y Martín Barragán están lejos de ser el remedio para los males que aquejan a los Pumas. Es más, ni siquiera pintan para ser titulares. Ese es el indefendible rompimiento al proyecto del presidente Ares de Parga que añoraba armar los equipos con canteranos y extranjeros, nada más, nadie de fuera y mucho menos jugadores que pueden ser formados en CU o... ¿no habrá futbolistas de la cálida de Vigón y Barragán en Cantera?

Se fue Alejandro Arribas. El defensor español fue mucho coraje, pero poco futbol. Llegó Nicolás Freire, central argentino que es una incógnita para una zona del campo en la que los Pumas han sufrido desde hace tiempo. Si no está listo, volverá la dupla Quintana-Jaques y a padecer.

En dónde quedó entonces la planeación o la labor de Ramírez como ese directivo que tendría que revolucionar el presente de los Pumas. Tan solo hay que recordar que como entrenador de Primera División, sin mezclar lo hecho en selecciones infantiles, no ha podido destacar, y lo que hizo con el América no es su mejor carta de presentación. Este hombre fue parte de uno de los peores momentos del americanismo con Michel Bauer como presidente del equipo. Y el presente de los universitarios no está como para darle tiempo a un proyecto. Necesitan dar resultados inmediatos, pensando en sumar para no caer más en la peligrosa zona de descenso.

Los Pumas están en la posición 12 de la porcentual. Con 84 unidades después de 68 partidos, apenas le sacan un punto de ventaja al Puebla, 11 al Atlas y 13 al Guadalajara y al Querétaro, respectivamente. De Juárez FC (que mantendrá el cociente de Lobos BUAP), y de Veracruz y el Atlético de San Luis (que arrancan en cero) todavía es complicado tener un panorama. Lo cierto es que un mal año futbolístico de los universitarios y se pueden volver a meter en problemas de descenso; de lo que se ve, por ahora, van a sufrir.

@gvlo2008
gerardo.velazquez@eluniversalbgwire.com.mx

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