La creación de la nueva Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación (HCTI) presentada por el Ejecutivo federal  el 13 de diciembre de 2022 es una iniciativa que llega en el momento justo. México necesita un marco legal moderno que impulse el desarrollo en este sector clave, que le permita posicionarse como un polo de innovación a nivel mundial.

La importancia de tener una ley que regule y promueva el desarrollo de estos rubros es evidente. Estamos en una era en la que el conocimiento y la tecnología son las principales herramientas para  el crecimiento económico y social. Un marco legal moderno y adecuado en este sector, sin duda, podría ser el catalizador de un cambio significativo en la economía del país y en la calidad de vida de sus habitantes.

La HCTI puede tener un impacto positivo en diversos ámbitos. Podría impulsar el desarrollo de proyectos innovadores, atraer inversiones, fomentar la investigación y las nuevas tecnologías, promover la formación de capital humano altamente capacitado, mejorar la competitividad del país y, en última instancia, mejorar la calidad de vida de la sociedad mexicana.

A pesar de la importancia que tiene el sector en México, existen una serie de retos que deben ser abordados para su adecuado desarrollo. Uno de los principales retos es el bajo presupuesto asignado a la ciencia y la tecnología. El presupuesto para el sector científico y tecnológico en México es uno de los más bajos de la OCDE, lo que limita la capacidad del país para invertir en investigación y desarrollo.

Otro reto es el bajo número de patentes registradas en México. Aunque el país cuenta con una gran cantidad de investigadores y universidades, el número de patentes registradas es muy bajo en comparación con otros países de la región.

El sistema de innovación en México también es un reto. A pesar de que el país cuenta con una buena infraestructura y una gran cantidad de investigadores, existe una falta de coordinación entre los distintos actores del sistema, lo que limita la capacidad del país para aprovechar al máximo su potencial en este sector.

Es importante señalar que esta iniciativa fue presentada sin mecanismos de participación ciudadana, foros abiertos ni parlamentos abiertos. Esto es un error, ya que la participación ciudadana es fundamental en una democracia. La falta de participación ciudadana puede ser vista como una falta de transparencia y un intento de imponer una visión particular del gobierno, sin dar voz a la sociedad.

Es importante que se garantice la participación ciudadana y que se escuche la voz de los distintos sectores interesados en esta iniciativa. La HCTI es una ley que afectará a la sociedad en su conjunto, por lo que es fundamental que se discuta y se construya de manera participativa.

La creación de la nueva Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación es una iniciativa importante y necesaria para el desarrollo del país. Sin embargo, es fundamental que se garantice la participación ciudadana y se construya de manera participativa. La sociedad mexicana necesita una ley que promueva el desarrollo en este sector, pero también necesita una ley que refleje su voz y sus necesidades.

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