En nuestra anterior entrega concluimos una serie sobre compositores de la Era Barroca. En esta ocasión daremos un brinco al Siglo XIX y hablaremos de un importante compositor romántico escandinavo: Edvard Grieg, pues no podríamos dejar de reseñar la contribución de Escandinavia a la música universal.

Edvard Hagerup Grieg nació en Bergen, Noruega, en 1843 y falleció en 1907 en la misma ciudad. Pianista y compositor, Grieg es el músico más importante y popular de Noruega y junto con Sibelius y Nielsen fueron quienes colocaron a Escandinavia en el ámbito de la música culta. Es un compositor netamente nacionalista y su estudio de la música folklórica noruega lo llevó a explorar nuevas formas musicales de su época. Es autor de canciones, piezas para piano y obras para conjunto de cámara. Tenía predilección por obras a pequeña escala, inclusive fue tachado de miniaturista.

Edvard creció dentro de una familia musical. Su madre, Gesine, fue su primera profesora de piano. Pronto descubren el talento del joven de 15 años y lo envían al Conservatorio de Leipzig para que lo desarrolle. Ahí Grieg centró su interés en el piano. Después de Leipzig se trasladó a Copenhague en 1863 y permaneció allí por 3 años para continuar sus estudios de piano. De regreso en Noruega empezó a estudiar la música folklórica tradicional de su país cuyos elementos fueron gradualmente introducidos en sus composiciones y se tradujeron en un elemento musical romántico. Su composición más notable es el majestuoso Concierto para piano en La menor Op. 16, el cual fue inspirado por el bello Concierto para piano de Schumann, obra que lo influenció poderosamente. En 1869 fue a Roma animado por el gobierno noruego, y ahí participó en una reunión con Franz Liszt, quien expresó su aprecio por el Concierto para piano de Grieg. Liszt, virtuoso pianista, tocó la línea de piano y el arreglo de la parte orquestal, leyéndolos a primera vista y en tiempo real lo que constituye un enorme desafío musical y técnico. El concierto, de los más populares del repertorio, se estrenó con gran éxito en Copenhague.

Probablemente su obra más popular es Peer Gynt, Suites No. 1, Op. 46 y No. 2, Op. 55, música incidental basada en cuentos de hadas noruegos y escritos en forma de prosa poética.

Estas dos suites parten de 23 piezas breves que compuso como música de escena para obra de teatro y Henrik Ibsen hizo una versión teatral en 1876. Entre las 8 piezas que forman las dos suites, hay 3 que han alcanzado un especial reconocimiento: “La mañana”, que abre la primera suite es una bella melodía acompasada de fondo para las maderas, que reproducen silbidos de pájaros. Esta melodía, poca gente sabe, ha sido utilizada con frecuencia para caricaturas y películas, pero cuando la oyen de inmediato la reconocen sin saber que se trata de Grieg. “La mañana” fue un favorito de Carl Stalling, quien a menudo la utilizó para la serie Looney Tunes producida por Warner Bros. También se advierte cierta similitud con esta melodía en la banda sonora de "El señor de los anillos".

Otras melodías son “En la cueva del rey de las montañas”, y “Canción del Solveig”, que se desarrolla en torno a una melodía lírica para cuerdas con acompañamiento de arpa.

Grieg ejerció gran influencia sobre los compositores franceses de principios del S. XX. Ravel dijo: ‘No hay otro compositor hacia el que sienta una afinidad tan próxima, aparte de Debussy’.

*Dedicada a mi hijo Álvaro, ilustrador y creador de comics, quien me sugirió que escribiera esta columna.

*Diplomático queretano; diletante de la música clásica.

 Twitter: @fgcossio

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