Para cerrar un año políticamente atípico, esta semana arrancaron las campañas del Ayuntamiento de Huimilpan. Es la segunda campaña de un año donde Querétaro tuvo tres gobernadores y la capital cuatro alcaldes. El PRI se derrumbó y el PAN volvió a ser hegemónico.

Destaca Huimilpan, municipio de la ZMQ; pese a formar parte de la mancha urbana, mantiene rasgos diferentes del resto, destaca la alta migración.

Durante las elecciones, Huimilpan presentó un foco rojo durante la jornada electoral. Denuncias de violencia y coacción del voto surgieron durante la cobertura periodística del 7 de junio.

El triunfador fue Juan Guzmán Cabrera, una mancha en la jornada del triunfo panista. Perdieron dos de los municipios que gobernaban de la ZMQ, recuperaban la capital, pero perdían El Marqués y Huimilpan.

Este último municipio resultó un punto sensible y de alto interés para el panismo y el gobierno electo.

Las impugnaciones procedieron y en septiembre, el Tribunal Electoral de Querétaro decidió anular la elección, con lo que el triunfo del Panal y Juan Guzmán Cabrera quedaba en el aire.

Se definió que la nueva fecha de elecciones sería este 6 de diciembre. El juego político empezó nuevamente.

Seis meses después, los jugadores son casi los mismos, pero el escenario electoral es completamente diferente.

Los partidos políticos sufrieron cambios en sus fuerzas internas y esto se reflejó en las candidaturas. Además, la resolución del Instituto Nacional Electoral señaló que los partidos debían presentar candidatos del mismo género que los presentados el 7 de junio.

Ello implicó reacomodos por las nuevas alianzas de las fuerzas políticas. Se conformaron dos bloques: el PAN y PRD; y el PRI, PVEM y Panal.

En este ajuste y tras la postura del INE, el ganador de la elección anulada quedaba fuera, toda vez que el Panal respaldó la candidatura del PRI, quien propuso a Celia Durán que había quedado en tercer lugar previamente.

El bloque PAN-PRD buscaba postular a Juan Pablo Heinze. El llamado del INE los obligó a repetir la postulación de su hermana, Cristina Heinze. Movimiento Ciudadano se sumó a esta candidatura con apoyo moral.

¿Quedó fuera Juan Guzmán de la carrera por la presidencia municipal? No, no quedó fuera. Con una bandera política distinta, es postulado por el Partido Encuentro Social, que en la pasada elección apoyó a Roberto Loyola, del PRI.

La primera elección fue muy cerrada. El Panal obtuvo 28 por ciento, el PAN, 24 y el PRI 23. El PRD 8.7 y Movimiento Ciudadano 5.6.

Durante la primera elección, la candidata de Morena, María Vázquez jugó un papel testimonial al obtener menos del dos por ciento de los votos. Sin embargo, ahora repite candidatura.

La novedad es la candidatura del PT, hace seis meses iba en bloque con el PRI. En esta ocasión decidió lanzar la candidatura de Zenaida Salinas.

La principal diferencia con junio es que la Casa de la Corregidora está en manos del panismo y éste apostará por refrendar su hegemonía en el estado.

Los partidos prevén un escenario de tres tercios. Los nuevos pactos jugarán un papel importante. El PAN cerró filas con el PRD y Movimiento Ciudadano, los cuales sumaban un 14 por ciento de la votación; sumado al 24 por ciento del PAN daría una mayoría.

La aritmética electoral no es tan simple. Las acusaciones contra Juan Guzmán no han pesado en su contra y pretende demostrar su popularidad.

El primer reto del panismo hegemónico llegó pronto y tiene un retador que no es tricolor, cuyas raíces son de extracción distinta a las de la tradicional clase política.

Periodista y sociólogo. @viloja http://victorlopezjaramillo.com/

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