Sí, ahora nuevamente le tocó sufrir el absurdo e irracional embate de la Cuarta Transformación a la biodiversidad. Lamentablemente el gobierno de México con ese afán de no dejar piedra sobre piedra de todo aquello que construyeron gobiernos anteriores, y sin importar si funcionaban o no, decidió transformar a la Comisión Nacional para el Conocimiento y el Uso de la Biodiversidad (Conabio) en un órgano desconcentrado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). Lo anterior significa que la Conabio pierde su personalidad jurídica, su patrimonio y su autonomía de gestión. Gestión sustentada en criterios científicos y no por intereses políticos y que le permitió colocarse como una de las mejores instituciones para la atención de la biodiversidad a nivel mundial. Lo anterior con el pretexto, a decir del secretario Víctor Toledo, de que la ASF así lo señaló desde 2013 (llama la atención la incongruencia del doctor Toledo ya que sistemáticamente el gobierno del presidente López Obrador ha desdeñado todo tipo de recomendaciones de todas las instituciones e inclusive de todos los expertos en los diferentes temas incluyendo el ambiental).

Semarnat con dicho cambio asesta un golpe terrible a la investigación aplicada, al aprovechamiento sustentable y por ende a la protección de la biodiversidad en el país. Recordemos que México esta considerado como el quinto país más megadiverso del mundo y que contamos con cerca del 70% de la variedad mundial de plantas y animales, que por cierto es propiedad de todos los habitantes del mundo, de esta y de las futuras generaciones. El golpe se vislumbra tendrá severas consecuencias ya que la Conabio que venía apoyándose en un Fondo para la Biodiversidad operado bajo un fideicomiso público-privado en el que instituciones como la Agence Francaise de Development, la Agencia de Cooperación Internacional de Japón, el Banco Mundial, la Fundación Carlos Slim, El Global Enviromental Facility, la UNAM, el Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza A.C., y muchos otros que venían contribuyendo, ya no lo podrá utilizar.

Es importante tener presente que en lo que va del 2019 y gracias a la “austeridad republicana” de la actual administración federal la Conabio perdió prácticamente a la tercera parte de su personal (reducción presupuestal que sin sustento ni visión han sufrido prácticamente todas las instituciones relacionadas con el medio ambiente como son: la Comisión Nacional Forestal y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas). De ahí a que justificadamente se dude del interés de Semarnat en ya no digamos fortalecer a la Conabio sino la de mantenerla en el nivel con el que trabajaba en el 2018.

Es de considerarse que aunado al terrible daño que se infringe a la biodiversidad, también se lesiona la imagen de México en el mundo, ya que el mensaje que se enviará con el mencionado cambio va en sentido contrario a lo que México había venido impulsando exitosamente en materia de protección y aprovechamiento sustentable de la biodiversidad, y por lo que inclusive era mundialmente reconocido. Por ejemplo, en 2016 en la número 13, COP-CDB celebrada en Cancún, 140 países suscribieron la Declaración de Cancún, propuesta por México, en la que se comprometieron a integrar la biodiversidad en sus marcos institucionales y legislativos respetando plenamente la naturaleza y los derechos humanos. Compromiso que con el mencionado cambio institucional de Conabio no se percibe se verá cumplido.

Fuente de los Deseos: Ojalá el doctor Víctor Toledo, titular de Semarnat, recapacite y corrija el rumbo. Ojalá opte por mejorar y fortalecer lo construido por administraciones anteriores en lugar de destruir lo logrado basándose en “transformar por transformar”.

Comisionado del Consejo Estatal Contra las Adicciones (CECA). @TAMBORRELmx

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