De manera lógica, el pronóstico para enfrentar al campeón Tigres, no era del todo favorable debido al muy irregular paso de Gallos Blancos durante el inicio del torneo, situación que se complicó más al recibir un gol tempranero el viernes por la noche. Si bien hay muchas cosas por mejorar, como lo ha reconocido el mismo Víctor Manuel Vucetich, regreso la mística que se había perdido, regreso ese equipo que todos queremos ver, que lo deje todo en la cancha, que independientemente del rival en turno, juegue así: a lo Gallo Blanco.

Dicen que de los errores se debe de aprender, y si se posee humildad, de las críticas también; en el futbol como en la vida misma, eso hace crecer.

Es incuestionable que esta gran afición, nunca abandona a su equipo, pero si por momentos se debe de exigir el mismo compromiso que se da en la tribuna, se debe de asumir y aceptar con autocritica y humildad. A lo largo de la historia de estos colores, así lo han entendido la mayoría de los jugadores que han pasado por la institución, hoy no debe de ser la excepción.

Así lo entendieron y así lo demostraron el viernes por la noche, donde más que el punto logrado, lo que se aplaude y agradece es la forma con la que esta oncena dejo todo en el campo de juego, donde no se guardaron nada.

Pocas horas tendrá el equipo emplumado, para ratificar esto el martes por la noche en el partido de ida, de los cuartos de final de la liga de campeones de Concacaf, donde se debe de sacar el triunfo en casa, para avanzar en este el primer torneo internacional de la escuadra queretana.

Marco regresa por la puerta grande

De manera inexplicable Marco Jiménez solo participo 21 minutos el torneo anterior, hoy es el jugador número 21 en participar durante el Clausura 2016 y ese número en los dorsales que con tanto profesionalismo ha portado en la camiseta, la noche del viernes volvió a brillar con luz propia.

Este emblemático número 21, regreso a la cancha, de donde no debió ni debe de salir, Marco Jiménez brindo 90 minutos como nos ha tenido acostumbrados durante tantos años, durante tantas temporadas de buenas, malas y en su mayoría peores. Su incuestionable talento futbolístico y por encima de todo, el amor y compromiso a este equipo y afición termino por contagiar a sus compañeros desde el silbatazo inicial, culminándolo con un gol de bandera, que es el justo merecimiento a su profesionalismo y al cariño y admiración incondicional de la que es suya: la afición queretana.

Las razones que se hayan tenido para su poca participación antes, ya no tiene caso cuestionarlas, hoy lo que sabemos todos… lo que deben de tener claro todos, es que sin lugar a dudas debe de tener un sitio asegurado en los convocados para los siguientes encuentros de lo que resta del campeonato.

Una vez más gracias por tu profesionalismo, entrega y humildad, dentro y fuera del campo de juego.

La Frase

“Los empresarios lo compran, lo venden, lo prestan; y él se deja llevar a cambio de la promesa de más fama y dinero. Cuanto más éxito tiene y más dinero gana, más preso esta”

Eduardo Galeano