Apenas quedó atrás la gravedad sanitaria y Gabriel Grasiuso, al fin trotamundos, retomó esa pasión de recorrer continente, Argentina, El Salvador, Panamá, asumiendo como Secretario General de la Federación Iberoamericana de Franquicias, FIAF, los grandes desafíos que esperan en la conclusión de 2022 para mantener el desarrollo de marcas, que el problema aclaró, no es el de crecimiento en el sector.

Tiempos para estar activos, de transitar en un camino gremial conjunto,  y “el pedazo de torta que toque será por la capacidad propia de cada nación y sus franquicias”.

Siempre un caballero, también fundador de la consultoría uruguaya, SurPlus Internacional, Franchise & Marketing, Grasiuso despejó ese pasado reciente, “nos gustaba salir en la foto, hoy, debemos privilegiar tiempo al trabajo, al intercambio de experiencias y de conocimiento; el mercado no permite la inactividad”.

El dirigente de la FIAF puso el dedo en el renglón, comentó que en el mundo de las asociaciones de franquicias, se confunde en algunos lugares, el dedicar labor al bien común con ejecutar y procurar una carrera solo para estar ahí.

“Hay que arropar a nuevos actores para que hagan bien las cosas; más allá del dinero, están las ilusiones, la posibilidad de concretar un negocio y ser prósperos; y si eso se hace mal, empezamos a estar en un problema”. Debemos trabajar y ser serios para que los que decidan emprender en este modelo, lo haga lo mejor posible, añadió Gabriel Grasiuso.

En charla hasta la Ciudad de Montevideo, Uruguay, fue enfático respecto a los oportunistas en el sector, que aparecen y desaparecen, dijo, pero confió que los tiempos actuales se encargarán de acomodar los hechos, pues la cuestión es la moral, la ética y hacer bien las cosas.

A esta conversación se sumó Diego Elizarrarás, en su momento, también titular de la FIAF, en su paso como Presidente de la Asociación Mexicana del ramo. En su opinión, la sacudida sanitaria fue de mucho aprendizaje para terminar improvisación en la industria.

Dijo que la franquicia en el continente pasa por un momento importante, “al final, lo que nos tocó vivir fue una sacudida que debió enfrentar este esquema de negocio con aprendizaje de cosas que nos hicieron falta, el planear, ¿qué debimos haber hecho diferente? Pero al final, la oportunidad está ahí”.

Elizarrarás Cerda recomendó a las franquicias el no relajar acciones, sino prever, el construir escenarios posibles para tener respuestas no improvisadas. El ahorro, por ejemplo, para aguantar, pudo ser la diferencia en esta debacle sanitaria y ahora, económica. Hoy, tenemos las consecuencias pero lo más importante es analizar que nos hizo falta. Hay ajustes, pero hacían falta para despertar a la franquicia, consideró.

Fue un extraordinario intercambio de apuntes de polo a polo del continente, y vaya mi agradecimiento por su tiempo y disposición al Secretario General de la FIAF, Gabriel Grasiuso y a mi amigo Diego Elizarrarás, quien en su momento propuso a esta Federación Iberoamericana “derribar muros” a partir de un conocimiento compartido. Hago votos porque la iniciativa continental se revitalice ante la ausencia de un proyecto serio y profesional.

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