Manotazo y tres patadas
y caer en área chica.
Un lenguaje de charadas
y actitud de pica pica.
Sollozar a la primera que recibes un rozón. Con un alma muy teatrera, convertido en un llorón. Ofenderse por lo menos, y acusar por ruido hacer. Con sus juicios no serenos un relajo así encender. Es la grilla futbolera trasladada al ring grillero. Opinión no muy certera convertida en un mugrero. Cuántos hay igual que Robben? que con trampa al lloriquear... estrategia no muy joven que los lleva a más sonar.