Para la autora Teresita Rendón, el “Municipio es la entidad políticojurídica integrada por una población asentada en un espacio geográfico determinado administrativamente, que tiene unidad de gobierno y se rige por normas jurídicas de acuerdo con sus propios fines”. Es decir, es la organización en donde las personas desarrollan sus principales actividades y por ello, el espacio privilegiado para la interacción social.

En el municipio se realizan actos de carácter político, jurídico, económico, cultural, recreativo y se satisfacen las necesidades básicas; los ciudadanos tienen su contacto más cercano con la autoridad y demandan atención y solución a sus problemas inmediatos que derivan de la vida vecinal; de ahí su especial relevancia y la exigencia de que se ocupe de gestionar los asuntos propios de la comunidad. Es decir, es el núcleo de la vida de los seres humanos en el que se desarrollan relaciones de vecindad y se gestionan los intereses de la comunidad. El Municipio es una estructura que organiza la cooperación de los miembros de una comunidad.

La Constitución es clara al delimitar cuál debe ser el objeto de las leyes a las que los municipios deben ajustar su actuar y respecto de la cuales pueden expedir cuerpos normativos o disposiciones administrativas. Al regular las actividades tanto de las autoridades como de los particulares se protegen los intereses individuales y colectivos y uno de los instrumentos es el Presupuesto de Egresos.

El presupuesto es una herramienta de planificación a corto plazo, por el cual se distribuyen los recursos del Municipio, mediante cálculos y estimaciones que muestran la forma de cómo se obtienen y se distribuyen los recursos.

Hemos visto en varios textos que la elaboración de los presupuestos requiere de varios elementos que permitan transparentar los planes de acciones durante la aplicación de los recursos y su destino para lograr los objetivos y metas claramente definidos, clasificando los gastos conforme a los programas y subprogramas que definan las actividades necesarias para su realización, determinando unidades responsables para su ejecución y evaluación de los resultados.

Al planificar el presupuesto, se debe tomar en consideración los datos socioeconómicos que ayudan a soportar las metas fijadas. No podemos dejar de mencionar que la claridad en el presupuesto es tema que no se puede obviar, es decir, debe ser entendible para que pueda ser consultado por los servidores públicos y administradores sin ninguna complicación.

El Presupuesto de Egresos es un documento al que la ciudadanía tiene acceso, por tanto, se debe publicar en el Periódico Oficial de la entidad federativa para que surta los efectos correspondientes.

Señala la doctrina que debe ser un documento exacto, pues las cantidades previstas corresponden a lo que el poder público necesitará para cumplir con sus atribuciones. Este principio hace referencia a lo que los economistas comúnmente señalan como presupuesto equilibrado, lo cual implica que lo recaudado deberá corresponderse con lo que se va a gastar.

Lo anterior no deja muy en claro, que no debe utilizarse los recursos de los municipios para el pago de indemnizaciones por asuntos ajenos a sus atribuciones, o el pago de gastos de honorarios profesionales por la realización de un testamento. No es un gasto discrecional o propio del presidente Municipal. Si es así, los órganos de fiscalización deben investigarlo, y en su caso, tomarlo como un desvío de recursos.

Ex presidente municipal de Querétaro y ex legislador. @Chucho_RH

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