Lo que se experimenta cuando alguien cercano fallece, es difícil de describir con palabras, pero se siente un vacío, aletargamiento, ausencia, a pesar que sepamos o creamos que la persona querida está muy bien, sabes que no la volverás a tener y existen muchos procesos tanto psicológicos, pedagógicos, emocionales, físicos e incluso estructurales por los que se pasa.

Hay personas expertas que te llevan de la mano para que se haga un proceso de lo que sucede. Hoy por hoy lo estoy viviendo en carne propia, quiero compartirles que he vivido y seguiré entendiendo a través de mi propia experiencia lo que alguna vez diseñé para mitigar el dolor de Rebeca, mi hija. En esta ocasión se trata de un dolor muy diferente, por ello le dedico a todas las personas que están viviendo una pérdida que pueden tomar estas opciones que ayudarán a que su proceso sea además de profundo, sentido y puedan expresar corporal, físico, mental y emocionalmente lo que sucede.

Una de las cosas en las que me basé para realizar la metodología y’u®, fue en la observación de las personas que viven de manera nativa, fuera de la civilización, las cosas que más me sorprendieron es que lo que hacían culturalmente y en sus ritos, liberan musculatura y accionan en el área neurológica lo que es consecuente de cada emoción, otra es que hacían la mímica y gestos que todos los seres humanos hacemos con ciertas emociones: al estar triste la boca y cejas hacia abajo, al estar contentos la boca sonríe o carcajadas, al estar enojados se frunce el ceño entre las cejas, se abre el pecho, se contrae la boca del estómago,   la reacción o acción,  gesto que no solamente es en  la cara, es en todo el cuerpo; desde el cráneo hasta los dedos de los pies se manifiestan.

Al entender y observar cada movimiento que por instinto se efectúa, comencé a generar personajes que los imitaban porque si en ese entonces yo le pedía a Rebeca o Fernando (mis hijos) que cuando vivieran alguna emoción la expresaran, era difícil para ellos, llevaban seis y siete años de aprender a controlarlo, borrarlo del mapa, llevaban toda su vida y probablemente ¡tú también!

Decidí hacer personajes porque a través de ellos mis hijos sí se expresaban, y si estaban tristes y no podían llorar imitaban a un dragón que pone cara de triste,  se toca el cuello y lo alarga, al subir la cabeza que hacían el sonido de llanto y después saca la lengua y echa fuego (lo pueden ver en la app y’u bubble, se llama “Tristeza”) y te invito a hacerlo, porque de esta manera, estiras los músculos que se contraen, expresas con mímica los movimientos que en tu cerebro están registrados como tristeza y luego, al sacar la lengua te quitas del nudo en la garganta, al subir y girar los brazos se abastece el timo, acciona y se quita el vacío alrededor del pecho y la boca del estómago, lo más importante: lo expresas, vives,  sientes, sacas, se siente muy bien y liberas.

Otra de las cosas que se sienten al tener una pérdida es muy poca energía, arrastras la toalla literalmente, no te quieres mover, ni quieres salir, ni estar. Para este tengo un personaje que se llama Flammabel que es el fuego, en la app se llama “Energía” la burbuja (videoclip), pero les voy a pedir que la hagan concentrados en los  glúteos, y que al prender la flama como Fer lo hace en el video, muevan mucho los glúteos, estos son músculos muy grandes y provocan que tu cuerpo genere mucha energía. Siempre en cualquier personaje de y’u® debes de seguir tres reglas:
1) NO DOLOR (no debe de doler nada físico al hacerlos).

2) AL MENOS UTILIZAR TRES SENTIDOS: por ejemplo en “Energía” escucha al fuego (imita con sonido) mira al fuego en tu mente (lo ves), muévete como fuego (sientes calor).

3) MÍMICA: literalmente conviértete en fuego imita sus movimientos imitando exactamente igual.

Exprésate, tu cuerpo está diseñado para hacerlo, llevas muchos años aprendiendo como no hacerlo, imita a los personajes y conoce el potencial que llevas dentro.

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