“El Querétaro nuevo que deseamos conservar”

Durante los últimos sesenta años, en el Querétaro que comenzara entonces su vocación industrial y de ahí su crecimiento que lo ha llevado a ser uno de los principales destinos de inversión, quisiera compartir mi apreciación personal hacia la conformación de grupos en el desarrollo de esta entidad.

La inquietud me nace desde hace muchos años en los que no he encontrado una explicación convincente a por qué no hay grupos de queretanos en diversos ámbitos.

Durante los años en que comenzó a detonar el crecimiento del sector industrial en las ramas, metal mecánica, alimentos, partes automotrices, maquinaria, etc., muchas de las pautas de inversión y desarrollo fueron hechas por grupos con sede en el Distrito Federal, pero que fueron llevando al Querétaro de entonces a una nueva conformación distinta a aquella que estaba ligada más a las actividades agropecuarias y ganaderas que prevalecieron cuando nuestra entidad, como el resto de México, concentraba mayor población en el campo que en las ciudades.

Como ejemplo de lo anterior menciono a Grupo ICA, Ingenieros Civiles Asociados, fundado en 1947 por 17 ingenieros y liderado por el Ing. Bernardo Quintana Arrioja quienes fueron un motor del desarrollo de nuestra ciudad capital en los años después de la postguerra.

Durante muchos años, he observado, pensado y concluido, que en nuestro Querétaro no se conformaron, por lo menos en la época que hago referencia, algún grupo de queretanos que sumaran esfuerzos y talentos para llevar a cabo alguna empresa o empresas que fueran creciendo en presencia y alcances con capitales comunes humanos o monetarios.

También lo considero en términos de la política y, permítanme explicar mi consideración en cada caso.

En el sector empresarial los personajes que destacaron fueron personas de esfuerzos estrictamente individuales o familiares en diversos rubros de los negocios de la vivienda, refrescos, ferretería, industria, comercio, entre otros. Algunos en su momento se unieron para formar instituciones como la Cámara de Comercio, de la Industria, el Club de Industriales y el tener, en los años setenta el Tecnológico de Monterrey en Querétaro. Sin embargo, nunca formaron un grupo que sumara capital conjunto y formara cuadros directivos con una visión de mediano y largo plazo. Estoy cierto que sin duda sí formaron gente e impulsaron nuevos negocios de éxito hasta el día de hoy, pero no correspondió a un propósito de grupo, sino a un propósito personal o familiar.

Lo mismo ocurrió durante décadas con lo más destacado y reconocido de la política. Los liderazgos están ahí, pero siempre en cada grupo hay una cabeza que es la que figura y los demás simpatizantes o colaboradores, giran alrededor de ella. Hubo un tiempo largo donde no se formaron los cuadros suficientes para los relevos y se pensaba que el futuro era lejano, pero nos dimos cuenta que el tiempo no detiene su marcha y hoy las circunstancias son distintas. Pero ahí mismo, no se formaron grupos donde se reconociera la conveniencia de una estructura de capacidad, fuerza y peso horizontal, sino estrictamente vertical y con ello ocurre que los liderazgos individuales de entonces, décadas después siguen vigentes en los distintos partidos políticos.

En la actualidad, la competencia electoral ha llevado a modificar el estilo de la política, pero creo que no tanto el estilo de los queretanos en lo referente a la conformación de grupos.

En ambos casos -el empresarial y el político- el pensamiento que prevalecía en aquellos años nunca consideró la importancia que puede significar una estrategia de grupo, que pueda y deba impulsar para bien, muchos esquemas de desarrollo en una comunidad.

Sin dejar de reconocer que muchos queretanos han aportado mucho para nuestra entidad, agradeciendo el esfuerzo económico y político que han realizado en favor de la generación de empleos, es hasta hoy que nos damos cuenta del valor agregado que tienen las estrategias y la búsqueda de sinergia para impulsar el desarrollo, la inversión y el bienestar.

El dar certidumbre y reconocer que es el trabajo de toda una sociedad diversa y plural, lo que permite incrementar y mejorar los niveles de bienestar de quienes la conforman con las prioridades que establece la mayoría.

Por otro lado, son y serán necesarios y convenientes los contrapesos para mantener el equilibrio y la armonía en lo que tiene que ver con las personas y las comunidades, nuestro hermoso Querétaro no es la excepción. Me resulta interesante que ante el crecimiento tan acelerado, se dé un equilibrio de fuerzas y una diversidad en el desarrollo para que, cada vez, con mayor preparación y formación de su gente en todos los ámbitos, permita que la población mantenga y mejore su niveles de bienestar y pueda incrementar la calidad de vida que se desea para la mayoría.

Solo hay un boleto de entrada, anteponer el interés general al personal o de grupo.

*Director administrativo Desarrollos Residenciales Turísticos (DRT).

Twitter: @Gerardo.Proal.

Blog: http://gerardoproal.tumblr.com

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