Los queretanos esta semana recibieron de todos los medios posibles la noticia de la cancelación del proyecto de instalación de parquímetros y uso de bicicletas en el centro histórico de la ciudad. Un proyecto que estuvo discutido por la ciudadanía por los altos costos y la inviabilidad de los parquímetros en el centro histórico, sin embargo, algunos ecologistas y deportistas esperaban con ansia el uso del transporte de dos ruedas.
Ante ello debemos de señalar fuertemente que el proyecto de movilidad, o al menos así se difundió, era parte de las modificaciones que ya se han hecho en puentes y pasos peatonales que involucran al ciudadano de a pie, brindando mayor seguridad, sin embargo, la siguiente etapa ha quedado truncada.
La cancelación de este proyecto de movilidad para los ciudadanos tiene grandes repercusiones, no sólo por los recursos mal gastados, en publicidad, en investigación, en reuniones de acuerdo y proveedores involucrados, sino que le han hecho perder el tiempo a la ciudadanía. Un fracaso rotundo haber dejado crecer un proyecto de movilidad sin pies ni cabeza, que le queda mal —esa es la versión oficial— a la administración municipal.
El tiempo perdido es un asunto gravísimo. No podemos tolerar que un presidente municipal no posea un plan de trabajo que tenga considerado su periodo administrativo. Inclusive áreas de oportunidad, o ese plan b, en caso de contingencias. No, no tienen rumbo, y los errores son recurrentes.
Necesario poder revisar cuáles fueron los puntos de acuerdo para respaldar la concesión que le ha quedado mal a la administración municipal, será que no se cuidó que tuviera al menos el valor de la responsabilidad por cumplir con los términos. ¿Se revisó la cartera de clientes del proveedor? ¿Sus productos acabados? ¿Su alcance para poder realizar tan ambicioso proyecto? Parece que no hicieron su trabajo previo, quienes empujaron a la empresa Aquiles Park SA de CV.
Cuando se emitió el comunicado del fallo en favor de Aquiles Park se advirtió que dicha empresa contaba con las condiciones disponibles de precio, calidad, financiamiento, imparcialidad y más cualidades que se ensalzaron en voz del secretario de Administración municipal. Podemos presenciar a un año de este fallo que el concurso por la licitación también fue un fracaso. La cancelación habla por sí sola.
¿Quiénes asesoran al administrador municipal? O es que el presidente hace oídos sordos no sólo a sus asesores, sino a quienes se debe, a los ciudadanos. Tengamos claro las formas tan egoístas de administrar. Que se administra bajo capricho y ocurrencia.
Señalar este proyecto fallido es parte de las asignaturas pendientes y erróneas de la administración municipal, recordemos el gasto innecesario para el helicóptero que rondaba por nuestra ciudad, así como el despojo de los comerciantes en la alameda por supuesto narcomenudeo y prostitución. Al día de hoy no se han presentado casos que sean evidencia de las decisiones que ha tomado el administrador municipal. Las acciones emprendidas no tienen una justificación, por ello reitero: es un gobierno que se basa en su humor cotidiano para decidir el rumbo de los ciudadanos.
Como ciudadanos que estamos conscientes de lo mal que nos hacen las pésimas decisiones de Marcos Aguilar, tenemos que estar vigilantes de esos actores que dan la cara de bondad y solidaridad en las campañas electorales, pero que se convierten en parásitos al tener el poder en sus manos.
Nuestro municipio y nuestro país requieren de actores auténticos, de actores con valores, pero valores reales, tangibles en el contacto con la ciudadanía, no aquellos que se venden con una fotografía posada. Necesitamos impulsar a esa gente que trabaja por un Querétaro digno y que vela de corazón por la ciudadanía.
Diputado Local de la LVIII LegislaturaPresidente de la Comisión de Asuntos Municipales y del Migrantedip.
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@CL_SanchezTapia
