Dos universidades queretanas presentaron proyectos enriquecedores en materia de animación y cortometraje, una de ellas fue la Universidad Politécnica de Santa Rosa (UPSRJ), de la carrera en Ingeniería en animación y efectos visuales; la otra fue la Universidad Autónoma de Querétaro, de la Facultad de Artes, con la creación de documentales de gran calidad que crean conciencia de lo que sucede en nuestro entorno, el talento y esfuerzo de los alumnos quedó plasmado de gran manera en estos trabajos.
La UPSRJ, por parte de la carrera de Ingeniería en animación y efectos visuales, realizó su séptima edición del Coyote Film Fest, con 15 trabajos de mucha calidad, como el cortometraje titulado Cirkuit rescue, dirigido por Humberto Licovali, Gerardo Moya, Andrea Mendoza y Juan Pablo Hernández. Supervisados estos trabajos por Mario Brenes, director de la carrera.
Platicando sobre el trabajo realizado por el equipo ganador, Humberto —uno de los directores del cortometraje— se sintió satisfecho por el resultado, sobretodo porque el trabajo se hizo a la distancia con sus compañeros, ya que la mitad de los integrantes del equipo se encontraban de intercambio en la ciudad de Halifax, Canadá, lo cual fue uno de los mayores retos a vencer, y eso le da un mérito mucho mayor a este excelente trabajo audiovisual.
Por su parte la UAQ, a través de la facultad de artes, realizó en el auditorio Esperanza Cabrera la presentación de varios documentales que trataron distintos temas de reflexión, entre ellos los que más llamaron mi atención fueron los de Sueños sobre puntas, que trata del trabajo que representa ser una bailarina de ballet y que describe cómo una disciplina como esta te ayuda a conectar con todo tu ser a partir de la fuerza física y mental, adicional a la disciplina y confianza que da el trabajo diario. Toca otro tema cada vez más usual como la depresión y la ansiedad que puede provocar el detrás de cámaras, algo que normalmente no es visible para el espectador.
Metamorfosis nos hace ver con un panorama actual sobre la comunidad draga y su normalización en nuestra sociedad actual, algo que antes no era así, un gran tema de reflexión.
Hasta que la dignidad sea costumbre trata de varios de testimoniales que cuentan su versión de cómo se vivió el paro de la universidad (30 de septiembre al 22 de octubre). Todos estos cortos fueron supervisados por Lydia Cortés, Mauricio González y Sergio Rivera, este último, director de la Facultad de Artes.
Sin duda, estas producciones realizadas por los jóvenes valen la pena verse, ya que sin importar la escuela de procedencia, se deja ver que hay trabajo de calidad en estas generaciones.
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