Un grupo de consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), entre los que se puede ubicar al presidente del Consejo General, ha caído en un protagonismo mediático y político innecesario, bajo la supuesta narrativa de defender la democracia en marco de la consulta para la revocación de mandato establecida por ley para 2022.

Sin embargo, sus discursos y acciones no solo han rozado los límites de un árbitro (función que desempeñan de acuerdo con la Constitución y las atribuciones del órgano autónomo), sino que en los hechos su agenda responde a intereses, timing y narrativa de la oposición política.

En un año de confrontación con el Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y el partido en el poder, este grupo de consejeros cimentó su plan en un cálculo político que no trajo los resultados esperados para el cierre de 2021: dos ministras de la Suprema Corte de Justicia (SCJN) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) han ordenado que continúe el proceso para organizar la consulta.

Como una muestra más de la polarización que vive el país (agudizada desde 2006), las diferencias públicas entre el Presidente López Obrador y la mayoría de consejeros (as) electorales han provocado narrativas que quieren encasillarnos o posicionarnos en las que, pareciera, son las únicas dos opciones (blanco-negro): defiendes o atacas al instituto.

Pero con un mínimo de raciocinio y análisis, usted también puede ubicar “los grises” en las tonalidades propias de esta coyuntura política. Uno de estos grises puede ser: en defensa del INE pero en contra del protagonismo de un grupo de consejeros.

O con más detalle: en defensa del INE, pero en contra del protagonismo de consejeros… y a favor de la austeridad (o en contra del despilfarro) en el uso de recursos públicos al interior del órgano.

Reconozco que los consejeros tienen elementos para inconformarse y responder a los ataques discursivos y los misiles de comunicación política provenientes de Palacio Nacional. Por supuesto que el Presidente ha cometido errores, y es saludable para la democracia que colectivamente se defienda las conquistas de los órganos constitucionalmente autónomos.

Pero otra cosa es ser ingenuo (a) y aplaudir todo lo que digan-hagan los consejeros bajo la supuesta narrativa de defender la democracia.

Como han documentado medios, el dispendio de recursos públicos en sueldos, pago de miles de pesos en decenas de asesores y otros gastos al interior del INE son lujos sin necesidad, despilfarro que debiera contrarrestarse.

¿Qué hubiera pasado si estos consejeros mostraran un mínimo indicio, uno, de disposición a la austeridad y eliminación de gastos superfluos? ¿No acaso hubiera sido una jugada maestra de comunicación?

No me refiero a que el ahorro de esos recursos se pudiera redirigir a la organización de la consulta para la revocación de mandato, sino solamente a la disposición de consejeros (as) a la austeridad, una de las banderas (lecciones políticas) que más eco tuvo al interior de la población en 2018 para el histórico 53% de votación.

En este 2022, exijamos al Presidente que se comporte como Jefe de Gobierno, no como candidato. A los consejeros electorales: comportamiento y acciones propias de un árbitro, no de jugador subordinado de Claudio X. González y la oposición.

Criminal infodemia sobre vacunas, por “especialistas”

Si usted sigue a Joaquín López Doriga en Twitter y a pseudo periodistas que critican la autorización de vacunas contra Covid-19 por parte de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) porque carecen de “aprobación” por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), no sea víctima de engaño.

La OMS no aprueba vacunas, sino que recomienda su uso. Existen órganos reguladores en cada país o zona que son quienes autorizan o aprueban el uso de vacunas.

No caiga en infodemia. Tampoco crea en “vendedores (as) de humo” (o “espejitos”) que hay en medios, sin un mínimo de ética y responsabilidad por lo que dicen o tuitean, para meter insidia y hacer que la gente dude de la utilidad de vacunas.

“Tenemos un polemista #Covid_19mx que parece no entender el diseño del estudio de eficacia vacunal ni saber interpretar una curva de incidencia (sobre resultados de la vacuna CanSino). A algunos medios parece no importarles porque el polemista toca la tonada deseada y sostiene la narrativa del "todo mal", advirtió, con acierto, Martín Lajous, epidemiólogo, investigador del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y SNI 3.

*Periodista y profesor de la UAQ

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