Borrachazo
Andaba Lupe García
unos alcoholes echando,
y muchas ganas tenía
como de andarla regando.
Cuentan las lenguas malas
que andaba retegirito.
Que no fue cuestión de balas
más sí pues de echar un grito.
Tal cual pleito de cantina
Lupe García valiente
estaba envuelto en “muina”
y de pleito muy caliente.
Y se armaron los trompones
y en ridículo quedó.
Se desataron pasiones
y nomás mucho se quemó.
Ah que los diputados
como este Lupe García.
Por eso están más quemados...
y van perdiendo valía.