La prediabetes es un estado de alto riesgo para el desarrollo de diabetes tipo 2. Uno de sus principales signos es el oscurecimiento de la parte posterior del cuello.

Esta condición se conoce como acantosis nigricans y se produce por una resistencia a la insulina, una hormona secretada por el páncreas, señaló el especialista en endocrinología, Rubén Silva Tinoco.

“Más que una sentencia es una oportunidad para mejorar la salud y la vida”, aseguró el director de la Clínica Especializada en el Manejo de la Diabetes de la Ciudad de México.

En el XXXI Congreso Nacional de Diabetes, realizado en Acapulco, Guerrero, el especialista destacó que las personas con prediabetes presentan niveles de glucosa en sangre en ayunas de entre 100 y 125 mg/dL.

Si bien esos niveles son más altos de lo normal, son más bajos que los umbrales utilizados para el diagnóstico de la diabetes. Por lo que a través de algunos cambios en el estilo de vida y medicamentos puede revertirse.

La acantosis nigricans puede afectar otras partes del cuerpo, "manchando y engrosando porciones de piel, sin volverla áspera, en áreas como nudillos, axilas, codos y rodillas, además del cuello, cuando se dan estos casos puede haber una deficiencia en las funciones del páncreas", dijo Ana Laura López Beltrán, endocrinóloga adscrita al Hospital de Pediatría del IMSS Jalisco, en entrevista con Notimex.

Algunos factores de riesgo para la prediabetes incluyen inactividad física, predisposición genética, sobrepeso y obesidad, hipertensión, antecedentes familiares y exceso de grasa abdominal.

También se sabe que las mujeres que tienen síndrome de ovario poliquístico, diabetes gestacional o han concebido recién nacidos con un peso superior a los 4 kilos, presentan un mayor riesgo de prediabetes.

Silva Tinoco indicó que las personas con esta condición pueden revertir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 si modifican sus hábitos alimenticios y reciben atención médica a tiempo. De lo contrario, el curso de la enfermedad seguirá.

Para ello, pidió consumir alimentos saludables como frutas, verduras, frutos secos, carnes magras y pescado, disminuir el consumo de alcohol, realizar actividad física y controlar la presión arterial, así como los niveles de colesterol.

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